6- Los amigos no miran a los amigos de esa forma

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GAVI:

Vamos ganando dos a uno contra el Valencia, el primer partido lleno de oportunidades perdidas que hemos podido terminar ocasionando dos goles, aunque uno haya sido de penalti.

El canario todavía no había salido, solo esperaba que por lo menos pudiera salir un rato, ya que lo necesita para callar bocas a la afición que dice que va a ser vendido, detestaba ver que no le apoyaran y quieran que se vaya por culpa de las lesiones, cuando en realidad es un jugador de diez, mi jugador de diez.

Era el minuto 63 y veo como Pedri está en la línea de salida, eso significa que va a salir, por fin el aire entraba a mis pulmones y una sonrisa sincera se me salió, me senté mejor en el sofá para verlo más de cerca.

- Esperemos que su presencia en el campo no fastidie a su equipo- me giré con rabia en los ojos hacía mi padre, no esperaba esto de él, pero decidí dejarlo pasar y centrarme en el partido, no se merece que la gente lo trate así.

- Verás como te va a callar la puta boca imbécil- mi madre hizo un ruido de sorpresa ya que no se esperaba que contestara así, me daba igual, nadie se mete con Pedri en mi presencia.

- Por su culpa vas a perder tu nivel, solo está en el Barça porque jugó con Messi, sino ya estaría en un equipo de segunda- me levanté con rabia, quería a mi padre, pero me enfadé con él ya que no para de atacar a Pedri.

Me fui a la habitación para seguir viendo el partido desde ahí, solo esperaba que el Valencia no marcara, porque sino empatabamos y nosotros queremos dar una buena primera impresión. En la pantalla volvieron a enfocar a Pedri y se me salió una sonrisa de tonto enamorado, lo que soy y no puedo evitar pensar en que el canario me ha dicho que quiere estar conmigo, pero que primero necesita superar lo que hizo la gilipollas de la abogada. La podía denunciar, pero eso sería un proceso largo y duro, el canario no podría ya que la afición tendría una excusa más para echarlo.

Al principio, tenía miedo de que Flick viera que Olmo es mejor que Pedri, a ver, no es para criticar ni nada de eso, pero no quería que el canario se quedara en el banquillo para que le den minutos a Olmo. Pero al ver el último entreno antes del partido, me sorprendió la amistad que crearon ellos dos, era como si se conocieran de toda la vida y en cierta manera eso me alivió un montón.

No me di cuenta, pero el partido había terminado y puse en marcha mi plan. Cogí las llaves del coche y me cambié en un momento para irme hacía la Ciutat Esportiva, sé que hoy vienen y quería ver al canario con la excusa de que tengo una pequeña molestia. Salí de casa sin decir nada, soy mayor de edad y puedo hacer lo que se me apetezca, siempre respetando que soy jugador profesional de fútbol. Durante el viaje conduzco en piloto automático, ya que en mi mente solo está Pedri y sus jodidas sonrisas, esas que te hacen que todo a tu alrededor se detenga y él sea el centro de atención. Por fin llegué y aparqué rápido, ya que dentro de un cuarto de hora habrá llegado.

Los preparadores me miran confusos, ya que no esperaban mi presencia justo en la noche, pero me daba igual ya que quería sostenerlo en mis brazos, ya que me dijo que se siente seguro conmigo. Estuve hablando un buen rato con ellos, comentando que tengo una pequeña molestia en la rodilla y que si me lo pueden revisar que no haya nada fuera de lugar. Me llevaron a una sala y veo como todos los jugadores van pasando de largo, estoy centrado en ver si pillo a Pedri y podamos hablar.

Han pasado cinco minutos después del último jugador y todavía no ha aparecido, intento hacer memoria de a ver si me he dejado a alguien para que pueda estar hablando con él, pero no se me ocurre nadie hasta que lo veo al otro lado de la habitación, viendo como pasan de largo y no me salen las palabras ya que el corazón se me encoge un poco ante la escena.

Entre Rumores y Sentimientos: La confusión de Pedri y GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora