8- Celos

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FERRÁN:

Después de todo lo que ha pasado está aquí, en los entrenos hablamos lo mínimo ya que no quiero recordar como terminamos lo más bonito que puede tener una persona y porque me estoy enamorando del canario mayor. Así que pongo mis manos en sus hombros para que salga de encima de mi cuerpo, sonríe de lado y entonces me doy cuenta de que los sentimientos nunca se han ido ya que mi corazón late como un loco.

- Eric...- asiente con la cabeza mientras se lame el labio- basta... lo nuestro terminó- niega con la cabeza y se vuelve a acercar.

Entre los dos, yo era el más fuerte, pero ahora estaba tan nervioso por su cercanía que mis músculos parecen gelatina, esta vez no pongo resistencia pero si que camino hacía atrás. Vuelvo a chocar con la pared y agacho la cabeza ya que no puedo ante su intensidad, pone sus dedos en mi mentón y me alza la cabeza haciendo que nuestras miradas conecten.

- Sigues queriendo estar conmigo- niego con la cabeza y de un manotazo aparto su mano, tenso la mandíbula mientras lo miro mal.

- Voy a estar con el hermano de Pedri...- pongo mis manos en sus hombros para mantener distancias- no vamos a volver ya que mis sentimientos hacía Ferna no paran de crecer- alza las cejas y coge mis muñecas poniéndolas encima de mi cabeza, impidiendo que me pueda mover.

- No te mientas, sigues queriendo estar conmigo- restriega su nariz por mi mejilla y cierro los ojos mientras siento mi cuerpo flotar- sigues queriendo tener sexo conmigo, aunque...- frunce su ceño, como si se acabara de dar cuenta de algo. Me mira con una sonrisa de lado y tengo miedo de lo que esté pensando, ya que conociéndolo, será el mayor disparate que vaya a decir.

- ¿Qué pasa?- se muerde el labio y aprieta el agarre en mis muñecas, las remuevo intentando que me suelte pero es en vano.

- Podemos hacer un trío...- me quedé estático ya que no me esperaba esa propuesta, cierro los ojos mientras agito la cabeza hacía los lados, como si no hubiera escuchado bien.

- ¿Qué?- una mano sujeta las muñecas, pero yo no hago esfuerzo para liberarme porque estoy procesando lo que me acaba de decir. Su mano libre la pone en mi mejilla, su pulgar acariciando mi labio inferior e inconscientemente entreabro la boca, sonríe y me lo mete dentro de mi boca.

- Tienes sentimientos hacía Fer...- rodeo mi boca alrededor de su dedo y veo como sus pupilas se dilatan- pero todavía los sigues sintiendo hacía mi- mete más el dígito, hasta que ya no puede más ya que está todo dentro de mi boca, llenándolo de saliva- por eso te propongo un trío con Fer, piénsatelo- iba a decir algo, pero el timbre de la casa se interpone y frunzo el ceño ya que no sé quién puede ser- ¿quién es?- su dígito sale de mi boca y me suelta de la mano.

- No sé- me encojo de hombros y camino hacía la puerta principal, intentando no perder el equilibrio con su presencia.

El menor me sigue y respiro profundamente porque algo en el fondo de mi corazón me decía que era el canario, no pude evitar sentirme culpable ya que he caído en la tentación de mi ex-novio. La abro de una y mi corazón se detiene al ver que tenía razón, estaba con un tupper lleno de comida y una sonrisa en la cara.

- Ferrán...- agita el tupper- al final me han dejado salir antes y he podido coger algo...- su mano libre la sube a mi frente y cierro los ojos ante su tacto, me daba tranquilidad- ¿cómo llevas la fiebre?- vuelvo a abrir los ojos y pongo mis manos en su cadera para hacerlo entrar en casa y para que Eric vea que ya tengo otro dueño.

- Mejor porque me ha cuidado el mejor- sonríe y entonces es como si notara que hay alguien más conmigo, porque se gira en su dirección y frunce el ceño al ver a mi compañero. Porque él no sabe que hemos tenido una época en donde estábamos saliendo a escondidas del mundo.

Entre Rumores y Sentimientos: La confusión de Pedri y GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora