¿Esto no puede ser posible?

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El suave resplandor matutino se filtra a través de las cortinas del departamento de Chizuru, iluminando el espacio con una luz cálida y acogedora. Kazuya está sumido en un sueño ligero, un sueño inquieto. En su subconsciente, siente algo cálido y reconfortante a su lado, una sensación que hacía tiempo no experimentaba. Poco a poco, sus ojos se abren lentamente, parpadeando al adaptarse a la luz. Su brazo derecho está envuelto alrededor de una figura esbelta, femenina.

Al principio, la confusión lo embarga. La textura suave del pijama de algodón que roza su piel, el delicado perfume floral que invade sus sentidos, todo le resulta familiar y, al mismo tiempo, sorprendente. Chizuru Ichinose, su exesposa, está acurrucada contra él, su cabello largo y castaño claro esparcido sobre la almohada. Su piel pálida brilla bajo la luz del sol, y Kazuya, durante un instante, siente una extraña mezcla de paz y nerviosismo.

El tiempo retrocede en su mente. Por un breve segundo, la escena le parece una cápsula del pasado, de aquellos días cuando despertarse juntos era algo cotidiano. En esos tiempos, el primer vistazo de Chizuru al abrir los ojos siempre era seguido por un beso suave, y ambos comenzaban el día con una sonrisa compartida. Pero ahora... ahora todo es diferente.

Chizuru también comienza a moverse ligeramente, su respiración profunda volviéndose más superficial. Los ojos de Kazuya se encuentran con los de ella justo cuando despierta completamente. Ambos quedan paralizados, mirándose en un silencio denso y pesado. El recuerdo de esos días de antaño es compartido, pero el peso del presente es abrumador. El pulso de Kazuya se acelera mientras intenta procesar la cercanía de sus cuerpos.

Por un segundo, los dos sienten el impulso de acercarse, de hacer lo que siempre hacían: un beso tierno, la rutina de una pareja que se había amado profundamente. Pero algo los detiene. Hay una tensión palpable en el aire, una mezcla de nostalgia y temor. Kazuya, a pesar de su torpeza habitual, no puede evitar notar cómo el ambiente ha cambiado. Chizuru, siempre la fuerte, siempre la independiente, tiene una expresión suave pero distante, como si estuviera lidiando con las mismas emociones contradictorias.

-Buenos días -dice Kazuya, su voz apenas un susurro. Su garganta se siente seca, como si las palabras estuvieran atrapadas en su boca.

-Buenos días -responde Chizuru, su tono igual de tenue. Sus mejillas están ligeramente sonrojadas, lo cual sorprende a Kazuya. No es común que Chizuru muestre este tipo de vulnerabilidad. Ella siempre había sido estoica, capaz de mantener la compostura sin importar la situación.

Ambos están aún demasiado cerca, el calor de sus cuerpos les recuerda la intimidad que una vez compartieron. Sin embargo, la incomodidad también crece. Ya no son la pareja que solían ser; los recuerdos están ahí, pero las heridas también. Lentamente, casi de forma torpe, Kazuya retira su brazo, separándose de ella. Chizuru se incorpora levemente, apoyando su espalda contra el cabecero de la cama, y mira hacia la ventana como si buscara una distracción.

-Hace... mucho que no despertábamos así, ¿no? -Kazuya intenta bromear, aunque su voz tiembla ligeramente.

Chizuru sonríe débilmente, pero no de la forma radiante y confiada que solía hacerlo en el pasado.

-Sí. Es raro. -Hace una pausa, como si estuviera eligiendo sus palabras cuidadosamente. -Solía... solía ser algo... normal, supongo.

La incomodidad en el aire es palpable. Ambos recuerdan los viejos tiempos, pero ninguno tiene el valor de abordar lo que realmente está pasando por sus mentes. El impulso de acercarse, de intentar sentir esa conexión de nuevo, está ahí, pero también lo está el miedo. Miedo de abrir viejas heridas, de cometer los mismos errores.

El silencio se instala de nuevo. Kazuya mira sus manos, que están nerviosamente entrelazadas. Su corazón sigue latiendo con fuerza, y no puede evitar preguntarse cómo sería darle una oportunidad más a esta relación. Pero también está el peso de su vida actual, de Yaemori y los hijos que acaba de descubrir que tiene. ¿Qué significa todo esto ahora?

Recuerdos del pasado (Yaemori X Kazuya)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora