The three musketeers | Taekook

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Jimin caminaba rumbo a la estancia del jefe de los mosqueteros, había pasado ya una semana de lo ocurrido, y sin duda, cumplió sus días de estricto reposo con su suspensión de actividades cotidianas.

Porque sí, Jungkook se había encargado de mandarlo a descansar todo el tiempo que le fue señalado, después de un sermón sobre respetar las indicaciones médicas.

El rubio no podía con eso, él siempre estaba activo, necesitaba estar haciendo su rutina diaria para sentirse bien y útil, de lo contrario, su malhumor comenzaba a aparecer.

Era extraño, pero él no estaba acostumbrado a estar recostado viendo la vida pasar mientras el personal de servicio le traía los alimentos y se encargaban de él.

Generalmente, él solo se ocupa de sí mismo.

Al llegar a la puerta de su destino, uno de los guardias le abrió la puerta para que pudiese pasar, ellos ya tenían las indicación de permitir su acceso así que no se mostraron intransigentes.

Después de agradecer, atravesó la puerta encontrándose al hombre en su escritorio, charlando con Eunwoo, quien estaba en una de las sillas frente a él.

"Siwon, Eunwoo, buen día."

"Buen día, Jimin." Respondió Siwon, recargándose en el respaldo de su asiento. "¿Qué te trae por aquí?"

"Vengo a pedir las fichas de los mosqueteros." Soltó de golpe, provocando cierta tensión en el ambiente en segundos.

"¿Las fichas?" Cuestionó Eunwoo, con una mueca en el rostro.

"Sí, los expedientes, el registro... no tengo idea de como les llaman." Murmuró el rubio, dedicándole una mirada rápida a ambos. "Necesito los antecedentes de Taehyung y Yoongi... también los de Hoseok."

Siwon frunció el ceño, llevando una mano su barbilla fingiendo interés. "Nosotros no podemos proporcionarte esa información, Jimin."

"¿Por qué? Tú manejas todo lo que tiene que ver con ellos, tú haces las pruebas y exámenes pertinentes para su aceptación. Los necesito." El más joven insistió, no podía dejar pasar más tiempo.

"Sí, lo hago, pero es información que tú no tienes por qué poseer." Se puso de pie, dirigiéndose a una de los libreros en la parte posterior del cuarto. "Tu puesto aquí, está a la misma altura que el mío, así que no puedes venir a pedirme eso como si nada."

"No lo hago porque quiera lucrar con esa información, tengo mis razones." Jimin se estaba impacientando.

"¿De verdad? ¿Cuáles?"

"No puedo proporcionarte esa información."

Touché

Siwon rió ante la ingeniosa respuesta del muchacho, y cuando regresó a su puesto, le mostró la pila de hojas maltratadas que dejó sobre el escritorio.

"Si los quieres, necesito que me traigas la orden del rey para que yo pueda dártelo, conoces las reglas."

Jimin enarcó su ceja ante lo dicho, claro que él más que nadie conocía los protocolos a seguir para la obtención de ese tipo de papeles, sin embargo, estaba casi seguro de que Siwon se los daría al no conocer el proceso.

Por primera vez en su vida, se equivocó. El mayor no era tan ignorante después de todo.

"Lo más pronto posible, aquí me tendrás de nuevo con la orden firmada por el rey." Su semblante era serio, era una de las pocas personas que no sentía temor por aquel hombre grandulón. "Y espero los tengas listos."

"Aquí te estarán esperando, Park."

Dicho esto, el rubio ni siquiera se despidió y salió un tanto molesto del lugar.