Le robé el novio a mi madre (Kiribaku)

Capítulo 26.(Corregido)

***

La compañera entró decidida a acercarse al pelirrojo y, cuando estuvo cerca, éste le preguntó:

—¿Y cuál es tu consulta, Ishikawa?

Ella sonrió, se acercó  a él lo máximo posible y contestó:

—Pues, lo que sucede es que no me queda claro a qué juzgado debo mandar esta notificación.

En ese momento, la cara de Eijirou fue un poema. ¿En serio le estaba preguntando eso?

"No puede ser que no lo sepa, seguro que tiene alguna doble intención."

Empero, Kirishima decidió no comentar nada son ese asunto y se limitó a ayudarla.

—¿Te ha quedado claro, Ishikawa?

—¡Sí, muchas gracias!—Le agradeció presionando su pecho contra el brazo derecho del otro abogado.

Eijirou se apartó rápidamente para cortar el contacto físico con Himari.

—Me alegra haber sido de ayuda pero, para la próxima, fíjate mejor. No puedes estar interrumpiendo el trabajo de los demás para dudas que no deberías tener.—A parte, te aconsejo que no te acerques tanto a una persona y menos si tiene pareja.

"¡¿Tiene pareja?! ¡¿Quién será esa zorra?!"—Pensó sintiendo que su sangre le hervía.

—S-Sí, entendido.—Me vuelvo a mi mesa, siento haberlo molestado.

—Bie. Hasta luego.—Le dijo mirando al ordenador de nuevo.

Ishikawa se sintió regañada y un poco despreciada mas eso no la iba a detener.

"Puede que, en esta ocasión, yo haya perdido. Pero no me rendiré, conseguiré que el Señor Kirishima sea capaz de ver que soy mejor que soy su novia y, de esta forma, se enamorará de mí."—Pensó estando ya fuera del despacho.

Por otra parte, Eijirou se sentía aliviado tras quedarse solo.

"Ugh. Creo que quiere seducirme, aunque no tiene oportunidad conmigo. Yo tengo a Katsuki y su cuerpo es mucho mejor. Tiene hasta más pecho que esta idiota."—Pensó continuando con su trabajo.

***

Katsuki se encontraba en un descanso del trabajo, en una cafetería cercana, junto con algunos compañeros que habían decidido hacerle compañía. Ellos estaban conversando pero él no participaba, ya que estaba pensando en su novio.

"Me pregunto cómo le estará yendo a Eijirou. Creo que voy a llamarlo, quiero hablar con él."

Acto seguido, el rubio cenizo le dijo a sus acompañantes que debía hacer una llamada, por lo que se iba a otro lado.

—Vale, aquí te esperamos.

Bakugou asintió y se marchó saliendo de la cafetería, dirigiéndose hacia un lado del local, donde tenía una mayor intimidad.

Entonces marcó el número de su amado con la esperanza de que el susodicho le respondiera.

>Hola, Katsuki. ¿Sucede algo?

—Hola, Ei. No pasa nada, sólo quería saber cómo te iba en el trabajo.

>Oh, me va bastante bien. Mucho trabajo. ¿Y qué tal tu día?

—Bien pero te echaba de menos, quería escuchar tu voz.

>Aww. Yo también estaba pensando en ti hoy.

El licenciado en matemáticas sonrió y preguntó:

—¿Ah, sí? ¿Y por qué pensabas en mí~?

Obviamente no podía decirle que había sido a causa de que una compañera de trabajo acababa de intentar coquetear con él.