Secreto en el "mar"

Noches de fogata

Un hombre no debe ser juzgado por sentir atracción, sin embargo la circunstancia cambia cuando este hombre ya tiene un lazo importante con alguien más, ¿Está mal? ¿Realmente podrías sentirte un santo y jurar que nunca te ha pasado algo similar? Recuerda que el futuro nos puede jugar muchas bromas, aunque Mario y Arath descubrían ó trataban de cubrir los sentimientos de atracción que sentían el uno por el otro, era imposible no estar cerca, la dinámica no ayudaba para nada y en el fondo ambos no querían parar cualquier cosa que estuviera pasando, este dilema los tenía atormentados tanto así que desarrollaron un insomnio, al principio no era importante luchar para conciliar el sueño pero transcurrido el tiempo fue agotante.

Mario se levantó de la cama frustrado tratando de recorrer el complejo vacío, se sirvió un vaso de leche quedándose parado un momento, analizando a qué lugar iría para disfrutar la fresca y callada noche, recordó que en el patio había una pequeña fogata donde de vez en cuando se iban las jóvenes hablar, recorrió el camino pero quedó helado al mirar a Arath sentado haciendo pequeños dibujos en la arena.
"¿Debo seguir caminando? ¿Me abra notado? Creo que aún estoy a tiempo de irme, aunque luce muy lindo con el cabello alborotado, tal vez necesite tiempo a solas."
Los pensamientos de Mario se esfumaron tras escuchar a Arath. — ¿Qué estás haciendo parado? Me da miedo que me acoses de esa manera.— el sarcasmo y humor ácido de Arath se podía ver a kilómetros, el de anteojos no le quedó más que hacerle compañía.
— Te equivocas, yo no sabía que estaría alguien tan molesto aquí, tendré que quedarme porque mi pretendía ilumina hasta el más oscuro rincón de cualquier ser amargado, disculpa quise decir reservado.— comenzó a reír Mario dando un sorbo a su vaso.
— En eso tienes razón, realmente eres una luz que puede alumbrar a cualquier tipo amargado, me siento cómodo siendo tu amigo.— dijo arath entre un suspiro como si se quitara un peso de encima pero a su vez se arrepentía de remarcar la amistad, sabía que no podría haber algo entre ambos pero aún así no quería cerrar alguna posibilidad.
Tras escuchar eso Mario sintió una emoción semi amarga, sabía que no fue nada malo lo que escuchó, cada una de aquellas palabras era positiva pero el límite de amistad le pareció molesto, innecesario, ¿Por qué remarcar que son amigos? Trato de disimular el enfado y confusión respondiendo al canoso.
— Me alegra escuchar eso, yo también te considero buen amigo. — Arath asintió con una sonrisa y un temple tranquilo aunque por dentro estaba molesto tras no poder expresarse libremente, había muchos impedimentos y no solo era las cámaras o el tonto programa, la sociedad, era su familia, le daba pena admitir que gustaba de alguien más teniendo hijos, esposa, sentía que le estaba fallando tras estar tantos años juntos, soltó un suspiro tratando de cambiar el rumbo de la conversación.
— ¿Qué haces aquí? ¿Tampoco puedes dormir? Me lastime la nariz con el aparato del apnea y es molesto dormir así.— era mitad mentira, si se había lastimado pero sabía que podía dormir sin el, por lo menos esa noche.
— Pienso mucho y extraño mi familia, creo que recién comenzó a afectarme, deberías checarte la nariz.— contestó Mario ocultando la verdadera razón del insomnio, aunque extrañaba a su familia el principal pensamiento era decidirse si quería afrontar lo que sentía por arath ó seguir negándolo.
— Te entiendo perfecto, como padres de familia no nos podemos dar el lujo de fallar en nada por nuestros hijos.— Eso sonó a indirecta a los oídos de Mario aunque no fue la intención del canoso, generalmente la pasaban muy bien juntos pero esa noche se sintió algo hostil e incómoda por lo que Mario decidió pararse y dar un bostezo falso.
— Creo que tengo algo de sueño, iré a la cama, gracias por la charla nocturna.— Antes de irse sintió un pequeño tirón en el pantalón de su pijama, bajo la vista viendo la piel canela de aquella mano que le sujetaba.
— Quédate un rato más conmigo.— Arath había actuado por impulso, sentía arrepentimiento por algo tan atrevido pero no quería dejar ir a Mario así, el de anteojos se sentó más cerca que la vez anterior quedando pocos centímetros de separación, Mario mentiría al decir que esas palabras no le hicieron calmar los crueles pensamientos que rondaban su mente y que su corazón parecía bailar un danzón de amor, estaba en silencio no sabía que decir, una situación difícil para él, los ritmos de los latidos aceleraron más tras sentir el calor del meñique enredarse con el contrario, soltó una risa tratando de disimular.
— Me quedaré hasta que ambos vayamos a la cama.— Arath apretó el meñique de Mario sonriendo junto a él, salieron pequeñas risas nerviosas de ambos y comenzaron a platicar sobre sus aventuras de jóvenes, transcurrieron varias horas hasta que el pesar de los párpados no podían más y los bostezos se hacían más recurrentes, sin notarlo ya tenían las manos entrelazadas.
— Es prudente regresar a dormir ahora que ambos estamos agotados.— Mencionó Arath separando lentamente el agarre de la mano, poniéndose de pie y extendiéndole la palma a Mario para ayudarle, el de anteojos acepto la ayuda tropezando ligeramente con el vaso de vidrio que había olvidado, Arath abalanzó su cuerpo para que sirviera como soporte y evitar un accidente mayor. — ¿Te encuentras bien?— cuestionó Arath preocupado, mientras Mario reía por la situación sin darse cuenta de la cercanía de ambos rostros, hasta ese momento no percataba de qué Arath le tenía abrazado estaba desconcentrado por el color de sus ojos y los finos labios junto a la vergüenza.
— La edad me hace olvidar cosas, pero ya suéltame que me siento vulnerable — respondió coqueto y juguetón, separándose lentamente, caminando así juntos hacia la habitación para descansar, esa noche lograron vencer el insomnio, soñando el uno con el otro.

<nota>
en ocasiones tengo miedo de que Brenda bazares me demande JAJA
comenten si les gustó el capítulo y si quieren que actualice así de seguido 🫦
mi Spotify puso "wish you were gay" mientras escribía el cap y me dio risa