La Serpiente De La Orden ┃ Harco

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Nota: Historia con un poco de la trama de mi fanfic "Frágil". Acá podrán leer algunas similitudes de esa historia.

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Otro día más. Otra noche más. Otra mañana. Otra semana. Otro mes. Otro año.

Más de lo mismo interminablemente.

Harry Potter estaba harto, harto de ser el señalado cuando su hermano gemelo Anuar no lo era, sino que, era un completo santo ante los ojos de sus padres. Mientras que, él no, no lo era.

—Harry —dijo su madre, Lily, tronandole los dedos en el rostro—, hablé ayer con Remus, me dice que tú nivel académico debe mejorar un poco más este año. Y sabes que no lo digo por mal, pero, Anuar es mucho más inteligente que tú y tú…

—Madre —comenzó Harry, con sequedad —. Si vas a estar alabando a mi hermano, te pido de favor que mejor ni hables conmigo. Yo sé perfecto lo que tengo que hacer cuando regresemos a Hogwarts. ¿Acaso Dumbledore no dijo qué se re seleccionarán a los de quinto año?

—Si —afirmó Lily, mirándole titubeante—. Es cierto, se hará una re selección de casas.

—Bien, entonces, no te preocupes por mi. Yo sé lo que hago.

Dicho esto, Harry se dió la vuelta y echó a andar al jardín de pequeña pero preciosa casa de el valle de Godric. Con pluma, tintero y pergamino ya en mano, se sentó en la pequeña mesa que había en el lugar.

Y comenzó a escribir:

Querida Hermione:

Gracias por las felicitaciones por mi cumpleaños, espero y lo estés pasando bien en la madriguera, mis padres me dijeron que tal vez iríamos en unos días. Asi que, tú, Ron y yo podremos vernos antes de lo esperado. Aunque padre insinuó algo..¿estás acaso en otro lugar?

Como sea, estoy nervioso por lo que ocurrirá en unos días. Volveremos a Hogwarts, eso es fantástico. Anuar aún sigue de pesado, padre y madre ni se diga. Lo bueno es que en Hogwarts no tengo que soportarlos, ¡ja, mentí!, papá ahora será el nuevo profesor de vuelo en Hogwarts. Pues, Madame Hogh renunció.

Con mis mayores deseos, y cariño,

Harry.

¡Claro que no le deseaba la felicidad a Hermione o a Ron! ¡menos si ambos estaban literalmente disfrutando sus vacaciones allá en la madriguera y él tenía que estar con su familia que era totalmente aburrida y sin gracia!

—¡Eh, Harry! —dijo la chillona (y ahora ronca) voz de su gemelo—. Mamá te envía a decir que iremos a Grimmauld Place. Sirius nos invitó. Y bueno, hay reunión de la orden del fénix.

Harry asintió, y llamó a Hedwig para luego atarle la carta en una de las patas. Y cuando se volvió a su gemelo, sonrió.

—No sé porque me hablas, al menos, yo no te molesto ni te hablo— dijo Harry, con indiferencia y un tono de voz pedante.

—Ay, no seas inmaduro, hermanito— le contestó Anuar—, y no te preocupes; Draco estará en buenas manos este año.

Al momento de escuchar el nombre de Malfoy, Harry, se volvió a su gemelo y dijo:

—¿Y, a mí que me debe de importar Malfoy?

—¡Ay, por favor, Harry! —exclamó Anuar, y rió—. Sabes muy bien que Malfoy te gusta. El año anterior te pusiste muy celoso cuando lo viste con Pansy Parkinson en el Yule Ball.

Harry, sin poder creer lo que escuchaba, frunció el ceño y miró a su gemelo con sumo desprecio. O al menos eso quiso intentar.

¿Él, enamorado de Malfoy? ¡Claro que no!

—Yo no estaba celoso por Malfoy, yo estaba celoso porque la chica que me gus...—paró de hablar—. ¿Por qué te estoy dando explicaciones a tí?

Hedwig ululó con molestia, pues, estaba cansada de esperar, pero Harry la ignoró.

—Si, si, ya sé —Anuar, rodó los ojos—. Estabas celoso de Cedric Digorry, porque la china es-

—Se llama: Cho. No: China esa.

—Vale, vale, que ya lo sé, Harry.

—Anuar, mira, ni sé porque estoy teniendo esta conversación contigo, me viene o me va lo que tengas por decir u opinar; gracias.

Dicho esto, despidió a Hedwig y se adentró a la casa.

La verdad era que no soportaba a su hermano gemelo, Anuar siempre era el gemelo que más recibía atención, y él el más ignorado, su propio padrino, Sirius Black; lo ignoraba y apenas y se preocupaba por él. Lord Voldermort fue quién decidió al elegido, y ese era Anuar, no él y él no tenía la culpa de eso. Aveces, Harry deseaba ser diferente y no ser tan 'poca cosa' como lo denominaba, James, su padre, no; él quería ser diferente; quería ser el sobresaliente; el mejor en clases y demás.

Pero no lo era, lastimosamente.