Izuku Intimidado

Deku la Pelota Antiestrés +18

Izuku supuso que podría ser mucho peor.

—¡Hhff! —gruñó, intentando sin éxito reprimir sus gemidos mientras Momo frotaba su bulto debajo de la mesa.

—Por favor, trata de concentrarte, Midoriya —le reprendió al oído con el rostro ardiendo. Sus suaves pechos presionaron contra su espalda mientras ella daba golpecitos con un lápiz en la lección escrita.

Izuku se retorció en la sala de estudio, los estudiantes que estaban trabajando arduamente cubrían el espacio y no le prestaban atención a él ni a Momo.

—Y-Yaoyorozu, es bueno que quieras ayudar, pero... realmente no necesito tutoría ... ¡AHN! —gritó Izuku, interrumpido por Momo que sacó su polla de sus pantalones y comenzó a acariciarla.

—No seas tonto, Midoriya. Has tenido un buen comienzo, pero necesitas desesperadamente algo de disciplina para llegar a donde necesitas estar —susurró mientras su mano se iluminaba debajo de la mesa con la activación de su don.

—Y todos planean ayudarte a alcanzar tu potencial —le informó con una sonrisa mientras formaba un blando agujero morado alrededor de su pene.

—¡Mmng! —Izuku echó la cabeza hacia atrás, apoyada en el hombro de Momo, mientras jadeaba y su rostro se ponía humeante mientras Momo lo abrumaba.

Sus párpados se agitaron débilmente al registrar la amenaza apenas velada que le había lanzado Momo. La idea lo hizo sudar aún más.

—¡Todos ! ¿Todos? —preguntó nervioso antes de que Momo se arrastrara hacia adelante en su banco, empujándolo contra la mesa mientras jadeaba desesperadamente.

—No te preocupes por eso ahora —le sonrió inocentemente Momo—. Me gustaría disfrutar de este momento, es muy relajante —ronroneó mientras continuaba bombeando rítmicamente.

El brillo debajo de la mesa regresó una vez más cuando cuentas vibrantes se pegaron al juguete y zumbaron alrededor de la polla de Izuku, haciendo retumbar su carne en una sensación entumecedora que lo dejó babeando.

—¡Oh, vamos! —gimió Izuku mientras estiraba el cuello hacia arriba y hacia afuera, como si su cabeza pudiera dejar atrás su cuerpo y el placer si se estiraba lo suficiente.

Momo lo agarró por la nuca y lo obligó a volver a prestar atención a la mesa mientras pretendía volver a enseñarle.

"Serás la pelota antiestrés perfecta, Midoriya..."

Izuku intentó alejarse, pero solo hizo que Momo lo arrastrara hacia atrás para sentarlo entre sus piernas, sus suaves pechos actuando como dos almohadas que consumían todo su cuerpo para su cabeza mientras rápidamente comenzaba a caer sin esperanza de escapar.

—No importa cuánto aprietemos, no tendremos que preocuparnos de si explotarás . —Momo agarró su saco al final de su discurso y le dio un fuerte apretón.

"OOHNN-" Los dientes de Izuku rechinaron mientras se sacudía en el abrazo de Momo, chorreando por el suelo mientras ella le sacaba el semen.

-

Quizás las cosas podrían ser un poco mejores.

—¡No! —jadeó Izuku en el fondo del aula.

Ectoplasm se giró para mirarlo con un tono interrogativo.

"¿Tienes algo que agregar, Midoriya?"

La cara de Izuku estaba roja como una remolacha, mientras que para el observador externo, estaba sudando sin ninguna buena razón.