Capítulo 33: We Did It, Baby

100 18 0
                                    

El día de la citación ante el juez amaneció sombrío, como si las nubes compartieran la tensión que flotaba en el aire.

Becky y Freen, tomadas de la mano, llegaron al edificio de la corte.

Sus corazones latían con fuerza, pero sabían que enfrentar a Heidy era un paso necesario para proteger lo que habían construido juntas.

Al acercarse a la entrada, se encontraron de frente con Heidy, quien aguardaba con una expresión de desdén.

Sus ojos se entrecerraron al ver a la pareja, y su desdén se convirtió en una sonrisa sarcástica.

- Mira quiénes son, la pareja perfecta. – dijo Heidy, cruzando los brazos, y un tono cargado de ironía.

Becky apretó la mano de Freen, sintiendo la tensión en el aire.

- No estamos aquí para jugar tus juegos, Heidy. – respondió Becky, manteniendo la voz firme. – Hoy se termina esto.

Heidy se rió, como si la situación le resultara divertida.

- ¿De verdad creen que pueden librarse de mí tan fácilmente? – preguntó, con una mirada brillando con malicia.

Freen, conteniendo la frustración, respondió.

- Lo único que queremos es que dejes de interferir en nuestra vida. – con firmeza.

- Oh, que tierno suenas, Freen. – responde Heidy levantó una ceja.

- Lo único que has hecho es crear mentiras. Este juego se acabó. No tienes poder sobre nosotras. – intervino Becky, luego de respirar hondo, viendo que el cinismo abunda en aquella mujer.

Con un último intercambio de miradas, Becky y Freen se dirigieron hacia el interior del edificio.

El ambiente era tenso, y la atmósfera en la corte no era diferente.

Se sentaron en la sala de audiencias, donde el juez pronto comenzaría a escuchar el caso.

Y en ese pequeño espacio de espera, Sun y Ongsa llegaron juntas, sentándose detrás de Becky Y Freen.

Heidy, al ver a su hija, sintió cómo su corazón se apretaba, al notar la mirada decepcionante que esta le dedica.

Cuando finalmente entró el juez, los presentes se puso de pie.

Una vez que se sentó, el murmullo en la sala se desvaneció.

- Estamos aquí para escuchar la solicitud de orden de alejamiento. – dijo el juez, mirando a ambas partes con seriedad. – Comenzaremos con la declaración de la demandante.

Becky se puso de pie con mucha calma.

Conoce mucho estos espacios.

- Su señoría, lo que hemos estado viviendo es intolerable. Heidy ha estado creando rumores, perfiles falsos en redes sociales y manipulando situaciones que han afectado nuestra tranquilidad y bienestar.

- ¿Tienes evidencia que respalde tus afirmaciones? – cuestionó el juez, luego de asentir, tomando notas.

- Sí, su señoría. Tengo mensajes y testimonios de personas que pueden corroborar lo que hemos vivido. – respondió Becky, entregando los documentos a la corte.

Freen se sentía nerviosa, pero al ver la determinación en los ojos de Becky, su confianza creció.

- Quiero agregar que esto no solo me afecta a mí, sino también a Becky. Hemos sido víctimas de acoso emocional y psicológico, y necesitamos protección. – intervino Freen. Que se levantó también.

Stay With MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora