Stay With Me

Capítulo 30: ¿Otra vez tú?

Días después, Heidy se sentía inquieta, pero una chispa de determinación iluminaba su rostro mientras revisaba su plan.

La creación del perfil falso y el rumor había sido solo el primer paso. Intentos que habían fallado, pero no pararía. Por el contrario, jugar más duro.

Mientras tanto, Becky y Freen se sentían cada vez más unidas a pesar del caos que Heidy había tratado de sembrar entre ellas. La audiencia estaba programada para la próxima semana, y aunque la ansiedad acechaba, ambas confiaban en que tomar acción era la única manera de recuperar su paz.

Una tarde, mientras Freen organizaba su salón de exposiciones, se sentó a tomar un descanso.

Necesitaba despejar su mente, así que llamó a Ongsa.

- ¿Cómo vas, mamá? – preguntó su hija al otro lado de la línea, con un tono de voz alegre que llenó el corazón de su madre.

- Aquí, en el salón. Todo tranquilo, solo pensando en lo que pasó con Heidy. – respondió Freen, sintiendo el peso de la situación.

- Te entiendo, mamá. ¿Y Becky? – indagó Ongsa.

- En la oficina, trabajando en los últimos detalles para la audiencia. Está tan concentrada... me siento afortunada de tenerla a mi lado. – dijo Freen, suspirando.

- Eso es genial, mamá. Pero también necesitas cuidar de ti misma. ¡No dejes que esto te consuma! – aconsejó su hija.

Freen asintió, aunque Ongsa no pudiera verla.

En ese momento, su mente se llenó de recuerdos de sus momentos felices junto a Becky.

Inclusive, los bellos momentos con su hija.

Decidió que esa noche invitaría a Becky a una cena especial en casa. Tal vez eso ayudaría a aliviar la tensión.
Y fue justo lo que hizo.

Le envió un mensaje de texto, invitándola a un restaurante de comida China, donde el ambiente del lugar era como sentirse en aquel país, rodeadas de su cultura.

Esa noche, Becky llevó a Freen a casa. Y una vez hecho, regresó a casa junto a su Hija Sun.

La cena había sido hermosa, llena de risas y complicidad.

Mientras tanto, Heidy, cada vez más frustrada por su incapacidad de dividir a Becky y Freen, planeó llevar a cabo un plan más.

Sabía que cada detalle podría ser un arma en su arsenal. Pasó horas planeando cómo lo haría para que se viera real.

Pero su diversión de crear planes para separarlas se vería interrumpido, ya que, a la mañana siguiente, el timbre de su puerta sonando, la despertó.

Un mensajero le llevaba un pequeño sobre.
Firmó, y recibió el paquete.

Sin embargo, su expresión cambió de expectación a incredulidad al leer las palabras "Citación al juzgado".

Su corazón comenzó a latir con fuerza, y una ola de nerviosismo se apoderó de ella.

- ¿Qué? – murmuró, sus manos temblando ligeramente al sostener el papel.

Se sintió acorralada, como si una trampa se hubiera cerrado a su alrededor.

¿Cómo era posible que esto hubiera llegado tan lejos?

Su mente corrió a mil por hora. Pensó en el perfil falso, el rumor que había esparcido sobre Becky y Freen, cuando visitó a Claudia en el restaurante.

La idea de que su pequeño juego ahora se convirtiera en un problema legal la hizo sentir vulnerable.

Se pasó una mano por el cabello, intentando organizar sus pensamientos.