La Bufanda del dragón (Natsu x Lucy)

Aclaración a una amiga

Lucy se despertó de buen humor y con muchas energías.

— buenos días onee-san

— buen día pequeña.

— ya veo que estás más tranquila hoy hermana porque cuando dormías no mencionaste a ningún Natsu.

Eso incomodó un poco a Lucy pero aún así se lo tomó con humor.

— gg... es verdad, por cierto tus padres no han vuelto, me extraña un poco.

— no te preocupes, pasa todo el tiempo, casi ya estoy acostumbrada — apenada la niña.

— uhm... — la maga no pudo evitar sentir empatía y nostalgia al ver la expresión de la niña.

Después de desayunar salieron a caminar por la ciudad, otra vez.

"uhm, ahora que lo pienso cuando Natsu cuidó a Asuka y yo le ayudaba también ella había estado sola a pesar de sus padres" — en la mente de Lucy.

— en qué piensas hermana Lucy, te noto muy ida.

— bueno, al parecer he conocido muchas personas que no han crecido con ausencia de padres pequeña... ahora que lo pienso Natsu también es así... y yo también... — mencionó un poco cabizbaja.

"y esa soledad ¿es lo mismo que he estado sintiendo al separarme de Natsu por este tiempo?" — pensó de inmediato.

— ahora estás conmigo hermana — mencionó la pequeña con una sonrisa — ya no estamos solas.

Pero en esa sonrisa poco a poco se derramaron un par de lágrimas de tristeza.

La niña posaba su brazo en sus ojos para limpiarse un poco las lágrimas.

Entre risas y llanto la niña solo estaba impávida limpiándose.

— gracias por estar conmigo hermana — sollozante la pequeña.

Acto seguido Lucy la abrazó

— tranquila, talvez yo tengo la culpa de que esto suceda, tranquila... yo estoy contigo — abrazó aún más fuerte a la pequeña.

Cargo en su pecho a la niña y se fueron a casa juntas.

"pobre niña, aunque me siento familiar con esta situación".

Mientras tanto en el gremio.

Natsu miraba el tablón de trabajos, hacia tiempo que no hacía uno.

— estoy tan aburrido que hasta contaría peces en cualquier lugar.

— oye por qué mejor no comerlos? — babeó Happy.

— porque no hay peces Happy — estaba desganado nuestro mago.

Los demás hablaban sobre el pelirosa.

— oigan qué le pasó a Natsu?

— está así desde que Lucy se fue.

Comentaron algunos magos sin importancia.

— debe ser difícil separarse de tu novia cuando recién andan saliendo ¿o será algo más?

— puedo oírlos saben.

— lo sentimos Natsu — dijeron al unísono.

Natsu suspiró de cansancio mientras su rostro besaba la mesa, se paró de su asiento fue hacia tabal de misiones y se quedó observando hasta que.

— hola Natsu — le dio una palmada en la espalda.

— ahhh hola Lisanna.

— conque haciendo nada ehhh Natsu.

— sí, desde que Lucy se fue no tengo ganas de hacer nada.

— Natsu...

— ¿sí? Lisanna.

— ¿recuerdas que de niños hicimos la promesa de casarnos? Pero ahora Lucy es tu novia.

— ... ahora que lo mencionas... es verdad — dijo Natsu desvergonzado y un poco relajada — ¿de hecho por qué no hablamos un poco afuera? — con mirada seria.

Natsu no había recordado casi nada de eso cuando Lisanna había vuelto de Edolas.

Todo el gremio quería escuchar la conversación, pero Mirajane, Erza, Juvia y todas las chicas incluyendo a los amigos machos de Natsu se los impedían.

Caminaban por el río de Magnolia.

— en verdad no lo recordaste Natsu, típico de ti...

Mencionaba divertida Lisanna.

— vaya que me conocías muy bien en este entonces jaja.

— aún te conozco con tus tonterías y cosas olvidadas — tenía el ceño fruncido.

— sí, pero también recuerdo que lo dijiste tú y no yo.

Al decir esa oración hizo que Natsu parara, pero Lisanna dio unos pasos más sin decir nada.

Hasta que paró.

— sí, también lo recuerdo Natsu.

No había volteado a verlo aún.

— Lisanna yo era un niño que no sabía sobre cosas amorosas, pero ahora que Lucy es mi novia, comprendo lo que quería en ese entonces... perdón por no haber sentido lo mismo en ese entonces y tampoco ahora, eres la primera amiga real que tuve gracias por eso.

LIsanna de inmediato volteó.

— ¡no tienes que disculparte! — soy yo la que tuvo fantasías de niña, recuerda que yo también era una niña, y al igual que tú, tú fuiste mi primer amigo, gracias Natsu.

— vaya Lisanna, quisiera abrazarte, pero por respeto a mi novia no lo haré, además, Lucy me mataría si se entera que estuve abrazando a otra mujer que no es ella — dijo en tono amenazado.

— lo comprendo Natsu, sabes eres mejor novio de lo que pareces.

— mmm ¿gracias? Bueno si no te importa me iré a casa ya no tengo más que hacer aquí.

— adiós Natsu — dijo con una sonrisa calmada

A la distancia Lisanna pensó "idiota, pero almenos sé que Lucy será la mejor esposa que podrías merecer Natsu" y limpiándosela lágrima que le cayó de un ojo y se fue a casa.