Personajes masculinos x tú [Yandere Simulator]

Yaku Zaishi

Laboratorio del club de ciencias, tarde en la noche.

Yaku Zaishi era conocido en la Academia Akademi por su obsesión con la química. Siempre estaba experimentando con diferentes compuestos, buscando descubrir nuevas reacciones. Su naturaleza vaga y evasiva hacía que muchos lo encontraran misterioso, pero T/n veía algo más en él: una pasión y dedicación que le resultaban fascinantes.

T/n había estado observando a Yaku desde que se unió al club de ciencias. Aunque al principio le parecía intimidante, pronto se dio cuenta de que Yaku era simplemente un apasionado de su trabajo. Decidió acercarse a él y ofrecer su ayuda en uno de sus experimentos.

Yaku: *mirando concentrado un frasco de químicos* Esta mezcla debería estabilizarse, pero algo sigue fallando.

T/n: *acercándose con una sonrisa* Hola, Yaku. ¿Necesitas una mano con eso?

Yaku: *sorprendido* Oh, T/n. Claro, podría usar algo de ayuda. Estoy tratando de equilibrar esta reacción.

T/n: *mirando el frasco* ¿Has probado ajustar la cantidad de catalizador? Podría ayudar a estabilizar la mezcla.*

Yaku: *pensativo* No lo había considerado. Eres brillante, T/n.*

T/n: *sonriendo* Solo trato de seguir tu ejemplo.

Yaku: *mirando a T/n con admiración* Sabes, desde que empezaste a ayudarme, todo ha sido diferente. Mejor.

T/n: *sonrojándose* Yo siento lo mismo. Me encanta trabajar contigo, Yaku.

Yaku: *tomando la mano de T/n* Hay algo que quiero decirte. T/n, me inspiras cada día. Creo que… me estoy enamorando de ti.*

T/n: *sorprendida pero feliz* Yaku, yo también siento lo mismo. Me haces muy feliz.

Yaku: *sonriendo ampliamente* Entonces, ¿qué te parece si terminamos este experimento y luego celebramos con una cena?

T/n: *riendo* Me parece perfecto. Vamos a hacerlo.

A medida que trabajaban juntos, T/n y Yaku comenzaron a pasar más tiempo en el laboratorio. T/n se dio cuenta de que, detrás de la fachada seria de Yaku, había una persona amable y considerada. Yaku, por su parte, empezó a apreciar la compañía de T/n y su entusiasmo por aprender.

Una noche, después de un largo día de experimentos, Yaku y T/n se sentaron en el banco del parque cercano para descansar. El cielo estaba despejado y las estrellas brillaban intensamente.

Yaku: *mirando las estrellas* Sabes, T/n, nunca pensé que encontraría a alguien que compartiera mi pasión por la ciencia de esta manera.*

T/n: *sonriendo* Me alegra que pienses así, Yaku. Me encanta trabajar contigo. Eres increíblemente talentoso.*

Yaku: *mirando a T/n a los ojos* Hay algo que quiero decirte. Desde que empezamos a trabajar juntos, he sentido algo especial. T/n, creo que me estoy enamorando de ti.

T/n: *sorprendido/a pero feliz* Yaku, yo también siento lo mismo. Me haces muy feliz.

Yaku sonrió y tomó la mano de T/n. Se quedaron allí, bajo las estrellas, disfrutando de la tranquilidad y la conexión que habían encontrado. Fue el comienzo de una hermosa historia de amor, basada en su pasión compartida por la ciencia y su mutua admiración.

Laboratorio del club de ciencias, tarde en la noche.

Yaku y T/n estaban trabajando en un nuevo proyecto, intentando desarrollar un compuesto químico que pudiera mejorar la eficiencia de las baterías. Ambos estaban profundamente inmersos en su trabajo, pero tenían enfoques ligeramente diferentes sobre cómo proceder.

Yaku: *mirando los resultados de su experimento* Creo que necesitamos aumentar la concentración del electrolito. Eso debería mejorar la conductividad.

T/n: *frunciendo el ceño* No estoy tan seguro, Yaku. Si aumentamos demasiado la concentración, podríamos provocar una reacción adversa. Creo que deberíamos enfocarnos en optimizar la estructura del ánodo primero.

Yaku: *cruzando los brazos* Entiendo tu punto, pero hemos probado varias modificaciones en el ánodo y no hemos visto mejoras significativas. Necesitamos un enfoque más agresivo.

T/n: *con pasión* Pero si no consideramos los posibles efectos secundarios, podríamos arruinar todo el experimento. La estabilidad es tan importante como la eficiencia.

Yaku: *suspirando* Tienes razón en que la estabilidad es crucial, pero a veces hay que arriesgarse para lograr avances significativos. ¿Qué tal si probamos ambos enfoques simultáneamente y comparamos los resultados?

T/n: *sonriendo* Eso suena como un buen plan. Podemos dividir el trabajo y ver cuál enfoque da mejores resultados.

Ambos se pusieron manos a la obra, cada uno siguiendo su propio método. La atmósfera en el laboratorio estaba cargada de energía y determinación. A medida que avanzaban, intercambiaban ideas y ajustaban sus experimentos en tiempo real.

Yaku: *mirando los resultados de T/n* Veo que tu enfoque está dando buenos resultados en términos de estabilidad. Tal vez podamos combinar lo mejor de ambos métodos.

T/n: *asintiendo* Exactamente. Si logramos equilibrar la concentración del electrolito con una estructura de ánodo optimizada, podríamos tener una solución revolucionaria.

Yaku: *sonriendo* Me encanta trabajar contigo, T/n. Siempre encuentras una manera de mejorar mis ideas.

T/n: *sonrojándose* Y yo disfruto de tu pasión y determinación. Juntos, podemos lograr grandes cosas.

Finalmente, después de horas de trabajo, lograron desarrollar un compuesto que superó sus expectativas. Se miraron con satisfacción, sabiendo que su colaboración y discusión apasionada habían llevado a un avance significativo.

Después de semanas de trabajo intenso en el laboratorio, Yaku decidió sorprender a T/n con una noche especial. Sabía que ambos compartían una fascinación por las estrellas, así que organizó una visita al observatorio de la academia.

Yaku: *mirando a T/n con una sonrisa* Pensé que podríamos tomar un descanso del laboratorio y disfrutar de una noche bajo las estrellas. ¿Qué te parece?

T/n: *emocionada* Me encanta la idea, Yaku! Siempre he querido pasar más tiempo observando el cielo nocturno.

Subieron al observatorio, donde Yaku había preparado un telescopio y algunas mantas para hacer la experiencia más cómoda. La vista desde allí era impresionante, con el cielo despejado y las estrellas brillando intensamente.

Yaku: *ajustando el telescopio* Mira por aquí, T/n. Puedes ver la Nebulosa de Orión. Es una de mis favoritas.

T/n: *mirando por el telescopio* ¡Es increíble! Nunca había visto algo tan hermoso.

Yaku: *sentándose junto a T/n* Sabes, las estrellas siempre me han recordado lo vasto y misterioso que es el universo. Pero desde que te conocí, he encontrado algo igual de fascinante aquí en la Tierra.

T/n: *mirando a Yaku* ¿De verdad? ¿Qué es eso?

Yaku: *tomando la mano de T/n* Tú, T/n. Me has mostrado que hay tanto por descubrir en las conexiones humanas como en el cosmos. Me haces sentir completo.

T/n: *sonrojándose* Yaku, tú también me haces sentir así. Estoy muy feliz de estar aquí contigo.

Se quedaron en silencio por un momento, disfrutando de la compañía del otro y la belleza del cielo nocturno. Luego, Yaku sacó una pequeña caja de su bolsillo y la abrió, revelando un colgante en forma de estrella.

Yaku: Quería darte esto como un recordatorio de esta noche y de lo especial que eres para mí.

T/n: *con los ojos brillantes* Es precioso, Yaku. Gracias. Siempre lo llevaré conmigo.

Yaku colocó el colgante alrededor del cuello de T/n y, en un impulso, se inclinó para darle un beso suave. Bajo las estrellas, compartieron un momento de pura conexión y amor, sabiendo que su relación era tan infinita y brillante como el cielo sobre ellos.