IV

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Spreen entrenaba en secreto, ya que sabía que sí sus padres lo descubrían, iba a tener un castigo serio, no entendía porque era malo, pero que podía hacer.

Se estaba alistando para ir a entrenar, ya que tenía fechas de cuando tenía que ir, entrenaba con sus mejores amigos, ellos lo ayudaban.

Pero tenía un problema y ese era Farfadox, sabía que lo iba a seguir, así que iba a intentar irse sin que lo viera.

Ya estaba listo, así que salió con cuidado, de ser visto, pensaba que Farfadox no lo había visto, así que solo siguió si camino, hasta ir al establo de los caballos.

Agarró un caballo, para luego ponerle su respectiva montura, hasta que escucho una voz.

- ¿A dónde se supone que vamos? -

Spreen soltó un grito, para luego taparse la boca, ya que ya había visto quien era.

- Dios, me vas a matar del susto, casi me da un paro, se suponía que solo yo me iba a ir. -

Farfadox miró el caballo y empezó acariciarlo.

- Bien, supongo que también necesito un caballo, ¿No? -

Spreen asintió con un claro enojo, solo quería irse él, pero lastimosamente también vendría Farfadox.

Spreen ayudo al caballero a preparar su caballo, para luego subirse en su caballo y esperar a Farfa.

- Dale, no tengo todo el tiempo. -

Hace un buen tiempo Farfadox no se subía en un caballo, así que tenía algo de nervios. Cuando finalmente se subió, empezaron su viaje.

Farfadox solo seguía a Spreen, ya que no tenía idea a donde ir.

...

Cuando llegaron, Farfadox se bajó primero, para intentar ayudar a Spreen bajarse de ese caballo, cosa que a Spreen no le gustó mucho, ya que pensó que el caballero lo veía como alguien inútil.

- Se bajar solo. -

El caballero tenía una sonrisa leve, pero al escuchar eso, la sonrisa se le borro del rostro y solo se apartó.

- Lo siento, príncipe. -

Este empezaba a hartarse de aquel principito, todo le parecía mal.

Farfadox miró un poco como estaba el lugar, estaba lindo, de cierta forma, había árboles alrededores, también había una mini cabaña y un lugar donde entrenan.

Notó a dos personas, este tenía su mano en la madera de su espada, mientras veía como el príncipe se acercaba a ellos.

- Fua, Conter, Shadoune, cuanto tiempo sin verlos.. -

Conter fue el primero en darle un abrazo a Spreen, están feliz de volver a ver a su amigo.

- Sí, lo siento por no haber venido antes, estaba demasiado ocupado. -

Spreen solo dio una risita leve, mientras correspondía al abrazo.

- Sí, ya me lo imagino... -

Empezaron a charlar un poco, pero para Farfadox fueron siglos, estaba aburrido, pero no podía decir nada.

Luego de unos cuantos minutos más, se pusieron de acuerdo para empezar a tener una lucha, con espadas, era algo peligroso y Farfadox tenía miedo que le pasara algo a Spreen.

Ya que sí le pasaba algo, posiblemente lo manden a matar o le quiten el puesto, realmente estaba nervioso.

Solo se quedó mirando, intentaba ocultar sus nervios y lo hacía re bien.

- Bien, vamos a ver sí ya estás oxidado, Spreen. -

Spreen dio una sonrisa nerviosa, hace un tiempo no entrenaba con la espada .

- Puede que sí, pero dicen que cuando eres bueno en algo, no se pierdes la chispa. -

Y así fue como comenzaron el combate, Shadoune y Farfadox solo miraban como los dos híbridos comenzaban a luchar.

Farfadox era el más atento a cada movimiento que hacían los dos y más a Conter, no quería que lastimara mucho a Spreen.

La cosa era que tenían que dejar en el piso al contrario y así ganaban, tenían que ganar 3 veces.

Milagrosamente iban empates, ni ellos sabían como.

- Bien, al parecer no está oxidado, principito mimado. -

Spreen estaba cansando, al igual que Conter, a Spreen no le gustaba que lo llamarán mimado, pero sí venía de una persona cercana a él, no le importaba.

- Ves, te lo dije.. Dale, alguien tiene que ganar, nos falta una. -

Así comenzaron el último combate. Shadoune ya se tuvo que ir hace rato, ya que tenía un compromiso, así que solo quedaron los tres.

- Mhm.. -

Farfadox aún seguía al tanto de todo.

Conter había ganado, dejó a Spreen en suelo, Conter quería clavar su espada al lado de Spreen, para asustarlo, lo cual lo logró.

Alzó su espada y estuvo a punto de enterrarlo al lado de Spreen, la expresión de Spreen era una asustada.

Claramente no sabía la bromita que le iba hacer Conter, pero Farfadox se percató de eso y fue a empujar a Conter, él tampoco sabía de su bromita.

- Para un toque, no le iba hacer nada, lo iba enterrar al lado, jamás le haría eso a Spreen. -

Spreen dio un suspiro de alivio, y luego se acostó en el suelo.

- Es mejor prevenir que lamentar. -

Respondía Farfadox con un tono serio, al igual que si expresión.

Conter no se lo tomó en serio, igual, ya se tenía que ir, ya era demasiado tarde, no quería que lo regañasen.

- Bueno, Spreen, ya me tengo que ir, ojalá poder volver a vernos pronto. -

Conter no dijo nada más y se fue, despidiéndose de las dos personas presentes.

- Bueno, príncipe, deberíamos hacer lo mismo. -

Spreen solo miraba a Farfadox, con una expresión de aburrimiento, no tenía ganas de levantarse de donde estaba, se sentía cómodo.

- Fua, que pereza. -

Este no tenía intenciones de levantarse y Farfa lo sabía, así que solo dio un suspiro.

- Bien, pero espero me perdone por lo que voy hacer. -

Sin más, Farfadox se agachó y agarró a Spreen, para luego cargarlo como sí fuera un costal de papas.

- Dios, juro que cuando tenga más fuerzas, te voy a matar. -

A Farfadox no le importaba mucho lo que dijera el contrario, solo quería llevar sano y salvo a príncipe.

...

" ¿𝗔𝗅𝗆𝗮𝗌 𝗚𝖾𝗆𝖾𝗅𝖺𝘀? "/ 𝗙𝗮𝗿𝗳𝗮𝗱𝗼𝘅 𝖺𝗇𝖽 𝗦𝗽𝗿𝗲𝗲𝗻 / [ 𝗕𝗟]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora