Ocupando su lugar (Adaptación Hyunin)

Capitulo 3

                                           
        Jeongin:                                         

— Dejenme procesar esto, Beomgyu quiere ser tu...— mi amigo Félix pestañea de más y observa incrédulo a mi gemelo.
— Por unos meses.— termina de decir.

Félix llegó hace poco a mi departamento y le presente a mi gemelo. Mi amigo sabe todo de mi y el resentimiento que le tengo a Beomgyu, por eso está sorprendido con la propuesta de mi hermano y que este en duda de aceptar o no.

— Si, me gustaría ser mi hermano. Jeongin tiene lo que deseo y eso es diversión en la vida.— responde mi gemelo tan ilusionado con la idea.

¡Es ilógico!

Mientras que él quiere diversión, yo quiero el amor de su esposo y el de mi madre. A veces el destino es una mierda.

— Lo haré.— digo mi respuesta.

Félix abre la boca de más que entrarían dos penes erectos en ella.

—  ¿De verdad? — preguntó Beomgyu, alegrandose de más.

— Creo que puedo divertirme un poco en tu vida y tal vez salvar tu matrimonio hasta tu regreso.— aseguro.

O talvez lo destruya.

— Estan locos.— murmura Félix negando muchas veces con la cabeza en desacuerdo.

Ignoro su mirada desaprobatoria y observo a Beomgyu.— ¿Cuánto tiempo le has dicho a tu esposo que te quedarías conmigo?

— Dos semanas.— contestó Beomgyu.

Perfecto.

— Suficiente tiempo para que te ayude a ser divertido y que ocupes mi lugar, ser tu es más fácil porque debo ser un chico bueno que tiene una aura de ángel andante.— solté con sarcasmo lo último.

— Gracias, Jeongin. Gracias por ayudarme en esto.— me abrazó emocionado.

Incómodo me deshago del abrazo.

Si, quizás mi conciencia entrando en acción.

— Félix, mientras no este aquí, quedarás a cargo de nuestra veterinaria y por favor, ayuda a Ricky en lo que necesite —pedí a mi amigo que aun nos mira con la boca abierta.

Se recompone y repite.
— Estan locos.—

Otra vez es ignorado con su comentario.

— Empecemos de ahora Beomgyu. Tu harás ejercicios para bajar los kilos de más o mis amantes se darán cuenta de tu cuerpo. Iremos también al salón de belleza para que te arreglen las cejas y el cabello de espantapájaros.— señalo horrorizado.

— Seré tu aprendiz.— me mira con ojos de cachorro.

Lo que me irrita.

— Entonces, empezamos desde ahora, la operación cambió de personalidades. — dí dos palmadas con mis manos para comenzar a enseñarle los ejercicios que Beomgyu tenía que hacer.

— Sigo creyendo que están locos.—  murmuró Félix sin moverse de su lugar.

— Bien, has bajado de peso, Beomgyu. Gracias a mis tips, que espero continues haciéndolo para que esto funcione.—

— Me siento mejor así.—  expresó mi gemelo orgulloso de su cuerpo un poco más delgado.

Tuve que darle jugos y todo lo que sea necesario para que bajara los kilos de más. No eran muchos por lo que fue fácil.