CAPÍTULO 27

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    Enserió, puedo cuidarme sola -dije por tercera vez a los chicos que me acompañaban caminando para mi casa.

El jodido de Jeon no tardo en decirles, era lo más que seguro. Hoy apenas pisé el salón, vinieron corriendo hacia a mí con una olas de preguntas, realmente no sabía quien le había contado. También podría haber sido Chan- largué un suspiro.

Anoche no dude en pedirme un taxi para regresar a casa, no quería aguantarlos camino a casa, así que como una mujer que soluciona tome un vehículo.

    No me importa, quieras o no empezaremos en acompañar a todos lados -largo Hyunjin- y más en las noches, imagínate si no hubiera estado Bangchan para defenderte -dijo haciendo una cara de susto exagerado.

    Quien les fue con el chisme, ya díganme! -pregunte por cuarta vez en el día.

    Eso importa?, la cosa es que tuvimos la suerte de enterarnos de lo que sucedió anoche -dijo esta vez Hoseok.

    Chicos creo que estamos exagerando un poco -comento Namjoon al fin dándose cuenta- No vamos a turnar y más por la noche, que dicen?.

Frunciendo el ceño los mire a los tres, ellos estaban de acuerdo con lo que dijo y empezaron a hablar de los días y horarios que tenían disponibles. Yo rodé los ojos y seguí caminando. Mire mi celular al sentir que me había llegado un mensaje.

"Cómo sigues Mon?" - Jihoon.

"Los chicos me contaron lo que pasó ayer" - Jihoon.

    Si... últimamente la ciudad se volvió peligrosa -escuche decir a Hyunjin.

Yo mantenía mi vista en mi celular mientras le contestaba a Hoon, "Estoy bien, no deberías de preocuparte" respondí honesta.

La tarde después de todo fue linda con la compañía de ellos, almorzamos y charlamos de cada tontería que salían de sus bocas, fue divertido, pero por suerte me dieron mi espacio y cada uno se largaron a sus casa después de haber quedado con ellos en ir esta noche donde Suga me llamaba para competir.

Apenas había tocado la cama mis ojos se cerraron cayendo en un profundo sueño, hoy fue un largo dia-

[...]

Al llegar al lugar, el ambiente ya estaba cargado de tensión. Las luces ténues iluminaban el asfalto, y el  de los motores llenaba el aire. El sonido de las motos que ya estaban en movimiento me hizo sonreír.

Me estacioné y bajé de mi moto, tomando un momento para observar a mi alrededor. Algunas de las máquinas que ya estaban ahí eran impresionantes. Motos de carreras personalizadas, con pintura reluciente y detalles que solo los verdaderos fanáticos podían apreciar. Los pilotos, también, mostraban esa misma pasión en sus ojos.

Había algo en el ambiente, algo que solo se siente cuando estás en una carrera clandestina: el desafío, la adrenalina, la sensación de estar a punto de cruzar una línea que separa la emoción del peligro. Vi a algunos competidores haciendo ajustes a sus motos, revisando el aceite, calentando los motores. Otros simplemente conversaban en pequeños grupos, tratando de relajarse antes de la competencia.

Disfrute un poco del ambiente bebiendo algo fresco, pero sin alcohol. Suga no tardo en avisarme que debería de prepararme para la primera carrera.

Me acerqué a la línea de salida y tomé un respiro profundo. Mi moto estaba lista y yo también.

El rugir de los motores eran músicas para mis oídos, al ponerme mi casco pude ver a Hoseok y Hyunjin entre el publico saltanto y gritando como locos, pero mi atención se desvió en cuanto lo vi. Estaba ahí, su mirada en mí, con esa sonrisa que tanto detestaba. Mi corazón se aceleró en el acto, pero no por la emoción de la carrera, sino por él.

𝐑𝐈𝐕𝐀𝐋𝐒❗➜ J.JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora