𝐑𝐈𝐕𝐀𝐋𝐒❗➜ J.Jungkook

CAPÍTULO 28

Ya habían pasado dos días desde el accidente, y aunque físicamente comenzaba a sentirme mejor, mentalmente estaba agotada. Los chicos, Hoseok, Namjoon y Hyunjin, habían estado a mi lado desde el momento en que salí del hospital, cuidando de mí con una dedicación admirable... pero, a veces, era demasiado.

    ¿Necesitas algo más? -preguntó Hoseok, inclinándose ligeramente hacia mí con una mirada de preocupación mientras me ofrecía un cojín extra.

    Estoy bien, de verdad -respondí, tratando de ocultar el ligero fastidio en mi tono. No quería parecer desagradecida, pero las constantes preguntas y atenciones estaban comenzando a saturarme.

Namjoon, sentado cerca, revisaba su celular, probablemente buscando más consejos sobre cómo cuidar a alguien en recuperación. Me miró de reojo y, como si leyera mis pensamientos, levantó una ceja.

    Solo queremos que estés cómoda -dijo con una sonrisa tranquila, aunque su tono delataba que también se estaba preocupando más de lo necesario.

Hyunjin, que estaba acomodando algunas cosas a mi alrededor, se detuvo y me miró con una mezcla de ternura y seriedad.

    No tienes que hacer nada. Sólo descansa. Nos tienes a nosotros -dijo, como si yo fuera a olvidarlo en algún momento.

Suspiré internamente. Era dulce, lo sabía, pero esa sobreprotección me estaba empezando a estresar. Me sentía rodeada de un ejército de cuidadores, y aunque sabía que lo hacían con buenas intenciones, me hacía sentir más indefensa de lo que realmente estaba.

Mi condición no era complicado, fácilmente puedo levantarme e ir por un vaso de agua, por supuesto debo manejarme con las malditas muletas, pero puedo hacer las cosas yo sola, no era necesario todo esta atención. Además, perdían tiempo en mí y deberían de estar pendiente con los nuevos trabajos de la universidad.

Si fuera por mí iría a la Universidad tranquilamente, pero me obligaron hacer reposo por una semana, que fastidió. Estar encerrada una semana entera, era lo peor.

    Chicos, sé que están preocupados -comencé con cautela, intentando no sonar ingrata- pero creo que puedo moverme un poco por mi cuenta. No necesito que estén vigilándome cada segundo.

Ellos se miraron entre sí, claramente no convencidos de que podía manejarlo. Hoseok fue el primero en hablar.

    Pero... no queremos que te esfuerces demasiado. Y si algo pasa...

    ¡Nada va a pasar! -le interrumpí, más exasperada de lo que pretendía- Estoy bien, sólo necesito algo de espacio.

    Entendemos que te sientas agobiada, pero no queremos arriesgar nada -dijo Namjoon dejando su celular a un lado.

Me senté mejor en el sofá, intentando ser más firme.

    Lo aprecio, de verdad, pero también necesito sentir que no estoy completamente inválida. Solo... denme un poco de margen, por favor.

Hubo un breve silencio antes de que Hyunjin asintiera lentamente.

    Está bien -dijo, aunque su mirada seguía reflejando preocupación- Pero si en algún momento te sientes mal, solo dínoslo, ¿de acuerdo?

Asentí, agradecida por el pequeño espacio que me estaban otorgando. Me apoyé en las muletas, intentando ponerme de pie por mí misma, y aunque sentí la mirada de los tres sobre mí, no dijeron nada más. Fue un pequeño alivio.

A veces el amor y el cuidado podían sentirse sofocantes, y aunque adoraba a mis amigos por todo lo que hacían, necesitaba demostrarme, y a ellos, que no había perdido mi independencia.