The Changed Destiny

Príncipe Azul

—Quién diría que un helado te ayudaría, Morgs —James comentó mientras dejaba su saco acomodado en su armario.

—Es lo mejor que me pudo pasar —Morgie dijo, casi dando brincos por la habitación.

James sonrió al verlo así de animado por el repentino plan de Uliana, ahora Morgie se veía de mucho mejor humor que antes.

—Ahora lo único que tengo que hacer soy amigo de Bridget —Morgie habló—, será fácil, está muy desesperada por aceptación y amistad, seguramente ella ya debe creer que somos amigos.

James soltó una risita mientras se preparaba para ir con los demás a la laguna. Por otro lado Morgie se estaba preparando para ir con Bridget a hacer lo que fuera qué la princesa quisiera hacer.

Morgie se colocó su larga bufanda negra en su cuello.

—Tal vez pueda convencerla de preparar brownies, me encantan —Morgie se miró al espejo de James, arreglándose su cabello. El pirata se le acercó por un lado, rodeándolo por los hombros.

—Un paso a la vez muchacho —James dijo—, no te emociones de más, puedes terminar enamorandola… a menos que ese también sea tu plan.

Morgie se quedó en silencio, mirando la imagen que se reflejaba en el espejo, con ambos tan juntos, felices…

—Dices tonterías —Morgie bromeó.

Maldita sea Morgie, ¿por qué no le has dicho a James qué eres tremendo jo… gay?

Maldita sea, James coquetea con todo lo que puede sin importar el género, pero aún así Morgie se acobardaba sobre decirle a sus amigos su orientación.

—No quiero nada con Bridget, nada de amor, nada de amistad, solo… —Morgie se miró al espejo.

“Solo lo que Uliana quiera”

—Solo seguir con el plan de venganza—Él sonrió a su reflejo.

James observó a Morgie a través del espejo, con una mezcla de diversión y algo más que no lograba identificar del todo. Lo rodeaba con su brazo, manteniendo el toque relajado, pero había una extraña tensión en el aire que ninguno de los dos parecía dispuesto a abordar.

—Venganza, claro —James dijo, tratando de mantener el tono casual—. Solo espero que no te metas tanto en tu papel y termines olvidando quién eres en realidad, Morgie.

Morgie desvió la mirada al espejo, su sonrisa titubeaba mientras sentía el peso de las palabras de James.

—Bueno, debo irme, Uliana está eufórica y se que hoy planeará todas las humillaciones posibles —James comentó aunque se detuvo al verse al espejo—. ¿Crees que me veo bien así o me falta algo?

Morgie también vio el reflejo, analizando la imagen de James y luego caminó hasta donde James guardaba sus accesorios.

—Perlas —Morgie dijo, sacando uno de los 3 collares de perlas qué James poseía.

—Siempre voy a confiar en tu buen juicio para las cosas brillantes —El pirata comentó mientras Morgie reía y se acercaba a ponerle el collar—. Con este ojo tuyo me encantaría tenerte en mi tripulación.

Morgie detuvo sus acciones luego de colocarle el collar, soltó las perlas y se quedó mirando a James, quien se alarmó.

—¿Dije algo malo? —Preguntó James.

—¿Me quieres en tu tripulación? —Morgie lo observó a los ojos y James entonces empezó a sonrojarse al caer en cuenta de lo que dijo.

—Bueno… —James tosió un poco—. Pensaba proponértelo en otras circunstancias.