Mabel's Brother... is pretty... | Dipeon

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Ya no faltaba mucho para que el verano volviese, y si los gemelos lo cumplían, también volverían... Lo segundo era lo que le gustaba más esperar a Gideon.

Tal vez ya no amaba a Mabel, pero quería volver a ser su amigo... Si la castaña quería claro. Extrañaba maquillarla o peinarla como lo hacía en el inició de aquella amistad... Además le quería volver a pedir perdón por como actuó, aún si ya lo hubiera hecho desde que terminó aquel apocalipsis y antes de que está se fuera.

... Pero en quien más pensaba entre los hermanos era Dipper... Y mucho si Gideon aceptaba la verdad.

El no entendía cómo es que el de nariz rojiza viva últimamente tanto en su mente, ya hasta debería cobrarle renta por lo mucho que dicho castaño se la pasa ahí adentró, como si un parásito fuera, hasta no podía evitar mencionarlo en casi todo, aun en cosas que no tengan que ver referente a el.

¿Eso lo causaba su amuleto ya roto? Imposible.

¿Bill lo hechizo antes de irse? No tendría sentido.

¿Acaso Dipper le hizo algún amarre o brujería? ... Esa está más que claro que no, pero igual seguía siendo una opción ciertamente "divertida".

Gideon no sabía lo que pasaba, incluso cada vez que pensaba en el chico se sentía raro... Cómo cuando estaba con Mabel, pero más fuerte y "doloroso" en cierto punto...

Su corazón palpitaba como si estuviera agitado, se sonrojaba fácilmente, le temblaba la boca, le sudaban las manos... El no entendía el porque.

Alguien normal pensaría "Bueno, si te sientes así deberías preguntarle a tu madre o padre que te podría estar pasando, ¿No crees que tengan respuestas?" Y la respuesta sin lugar de dudas sería un rotundo "Ni loco".

Su mamá apenas y prestaba atención a lo que le decía la mayoría del tiempo, y aunque haya mejorado últimamente ese comportamiento distraído seguía.

Su padre... Bueno, esa es facil de responder; No el tiene confianza para preguntarle ESAS cosas, no le contó sobre su enamoramiento con Mabel hasta lo del periódico, ni bromeando le iba a confiar el como se sentía al pensar en Dipper.

Así que no tenía el como averiguar el porque de esos "síntomas" raros... Aunque fueran similares a algo ya conocido, no lo quería aceptar... Ni se ponía a pensar en ello mucho...

... Pues Dipper no le dejaba pensar en otra cosa últimamente.

–Agggahh...– El albino se agarró del pelo, soltando un gruñido agotado a su vez que golpeaba su cabeza contra su escritorio –Sal Pines sal Pines sal Pines sal Pines sal Pines, ¡¡SAL PINES!!– Sus gruñidos y gritos no tardarían en volverse lloriqueos desesperados –¡S-aaaaaaaaaaal.... Sal yaaaa....! ¡¡Yaaaa...!! ¿¡Porque no saleeesss...?!–

Que suerte que sus padres no estaban en casa ahora, si no, tendrían que soportar los lloriqueos RUIDOSOS de su hijo... Y vaya que no eran adorables.

–... D-ipper... S-solo sal... ¿P-orque...? ¿P-orque n-no sales...? ¿¡Q-ue hice a-ahora para q-ue no salgas?! ¡¡P-por favooooor!!– Por un poco de dolor de garganta sus lloriqueos bajarían de volumen, volviéndose de apoco sollozos silenciosos –¿... Por... Que...?–

El pararía de hablar un momento para mirar a su puerta, dónde aquel montaje en honor a Mabel no estaba... Aunque si había quedado algo en dicho lugar... Aquella foto de Dipper.

–... ¿Porque...?–

Dios, ese castaño lo hacía querer agarrar un cuchillo y clavarselo en su cabeza para dejar de pensar todo el dia en... Dipper Pines.