Nueva faceta

21.- Té

Luego de aquel ataque vinieron algunos mas, pero solo implantando maldiciones alrededor de nuestra casa, lo cual nos sirvio para confirmar que la barrera servia, por suerte y con ayuda de Ijichi se levantaron ventanas y nadie de Ozu se entero de los diferentes acontecimientos ocurridos, pero aquello hacia poner a Satoru cada vez mas cansado. Varias veces tuve que pararlo antes que fuera en dirección al Clan con intenciones homicidas, pero siempre le recordaba que debiamos ser mas ingeniosos y lograba calmarlo un poco. Ambos sabiamos que esto era solo el lapsus para cansarnos previo a que tiraran la artillería pesada por lo que ahora teniamos mas ayudantes del Clan Gojo acechando por nuestra protección, tantos que ya habia escuchado comentarios un dia en el minimarket de parte de unas vecinas notando el aumento de turistas al santuario. Esto no podia seguir asi, pero no sabia que exactamente hacer.

-Debemos llevar el combate para alla-dijo una noche Satoru en la mesa luego que mi abuela se haya ido a dormir.

-Pero eso seria hacer exactamente lo que ellos quieren y no sabemos que trampas pueden tener.. no quiero volver a enterarme que te encerraron otra vez-dije apenada.

-Utahime, no los arriesgare otra vez mas-dijo este unánime.

-Ni siquiera intentaras negociar conmigo?-pregunte molesta

-No la seguridad de ustedes.

Entendia que estaba abrumado por todo, demasiado cansado lidiando con las misiones y con el constante peligro de un ataque, pero no estaba razonando bien, habia que hacer un plan, no ser impulsivos!

-Asi caeras directo a la trampa de ellos-dije con los brazos cruzados.

-No con mi fuerza-dijo arrogante

-tu fuerza no sirvio contra Kenjaku en Shibuya.

Él me miro sorprendido y con un puchero a la vez.

-Es tiempo de hacer un plan-trate de convencerlo

-Utahime los planes nunca funcionan-dijo este jugando con una taza de la mesa.

-No si no los sigues-dije mirandolo fijamente

-Eso es aburriiiiidooooo y te da poca libertad a las nuevas adversidades-y apoyo su cabeza en la mesa.

-ay! Satoru!! eres peor que mis ex alumnos!

-shh! Okasan y Ren podrian despertar-dijo burlesco con una sonrisa enorme y apoyando su cabeza en su mano.

-Satoruuuu-dije mas bajo pero igualmente molesta.

Él me miro fijamente aun con su sonrisa y fugazmente se acerco a besarme.

-Me encanta cuando te enojas-y me beso el cuello mientras metia sus manos debajo de mi camiseta.

-No creas que te libraras de esta conversación-dije tratando de alejarlo sin querer hacerlo, ya que mi cuerpo cedia demasiado rapido a él.

-Te escucho-dijo mientras bajaba su boca a mi clavícula haciendome gemir suavemente-este plan si me agrada-dijo burlesco y amasando uno de mis pechos.

-Eres un tramposo!-dije totalmente roja y sabiendo que él habia ganado.

-Solo sé jugar bien mis cartas-dijo arrogante.

Aquella noche pudimos llegar a un solo acuerdo en la sala, el de amarnos. Lo que él no sabia es que no me daría por vencida.

-Necesitamos su ayuda..-dije un poco nerviosa por telefono, ni siquiera sabia si estaba haciendo lo correcto.

-Y que te hace pensar que los ayudare?-me respondio la otra persona.

-Supongo que el haber apoyado nuestro matrimonio y seguir queriendo que Satoru sea el lider otra vez-me estaba jugando todas mis cartas con esto.