No mires tres veces hacía atrás {Larry Stylinson}

Capítulo 1.

Louis, Liam y Niall, caminaban tranquilamente por los pasillos de la universidad. Saludando a cualquiera que los saludara a ellos o simplemente sonriéndoles a sus demás amigos.

Llegaron hasta el casillero del rubio donde este saco un libro y lo guardo en su bolso.

–¿Qué clase tienen ahorita?

Liam miro su horario e hizo una mueca.

–Literatura, la peor. No me gusta.

–Suerte tu –Louis también hizo una mueca–. Yo tengo filosofía, siento que cuando estoy en esa clase puedo analizar toda mi vida.

Sus amigos asintieron de acuerdo con él.

–Yo tengo matemáticas –Niall sonrió–. Veré a la sexy profesora Murciar.

–Su apellido es muy raro.

–Cierto –Liam coincidió con Louis–. ¿De dónde es qué es?

Niall lo miro con las cejas alzadas.

-No importa de donde sea. Es sexy y eso basta para mí.

Sus dos amigos rodaron los ojos. Comenzaron a caminar de nuevo, cada quien quedándose en el salón que correspondía.

Louis entro mirando para todos lados buscando un puesto vacío. Lo encontró a lado de Tomas y no pudo evitar que una sonrisa se posara en sus labios.

El chico era caliente.

–Hola, Tom –saludo alegremente sentándose a un lado de él.

El aludido le sonrío a Louis coquetamente.

–Hola, precioso. ¿Cómo te va?

–No tan bien como a ti –el castaño se inclinó un poco más en la mesa quedando más cerca del chico–. ¿Y a ti?

Tomas imito su acción y se inclinó también.

–Estoy feliz de verte.

Luego de una sonrisa por parte de Louis. Ambos chicos unieron sus labios en un beso lento. Sus lenguas se encontraron y comenzaron a acariciarse una con la otra. Se separaron solo cuando los tacones de la profesora sonaron contra el piso haciendo que todos hicieron silencio.

Se podría decir que Louis y Tomas eran algo así como amigos con derecho. Ambos se gustaban, se coqueteaban, se besaban. Pero hasta ahí.

Louis saco el cuaderno de su bolso comenzando a hacer garabatos. Odiaba filosofía. A lo lejos vio al hermano de Jack. Edgar. Arrugo el entrecejo al acordarse de que esa mañana no había visto a su amigo.

Tendría que preguntarles a los demás.

Toda la mañana se la paso encerrado en la biblioteca cuando unos de sus compañeros llego y le dijo:

"Louis, ¿tienes las respuestas del examen de hoy?"

¿Examen? Él no sabía de ningún examen. Así que tuvo casi que salir corriendo para la biblioteca, llegar, sentarse y comenzar a devorarse notas que tenías escritas en su libreta.

La hora de salida por fin llego y Louis nunca en su vida estuvo más agradecido de oír la campana sonar. Guardo todas las cosas en su mochila y se la guindo al hombro, despidiéndose de Tomas con un beso.

En la salida de la universidad estaban sus mejores amigos esperándolo mientras hablaban entre ellos mismo con una mueca en el rostro.

–¿Qué tal chicos?

Ambas miradas se posaron sobre él y pudo jurar que vio lágrimas en los ojos de Liam.

–¿Qué paso? –rápidamente su instinto de preocupación se activó haciendo que se colocara nervioso.