INFIDÈLE.

Capítulo diecisiete. {FINAL}

Baekhyun entró en el apartamento y caminó directamente a su habitación.

Apenas habían salido del restaurante le dijo a Yujin que cancelara toda su agenda del día y le ordenó que si alguien de LOEY clothes o Ksoo, volvía a contactarse para una reunión, que la rechazara de inmediato. En su mente, creía que lo volverían a hacer, porque esa sería la única manera en que Kyungsoo podría reunirse con él y discutir sobre lo último que le mencionó.

Las palabras del ex-prometido de Chanyeol resonaban en su cabeza, ¿qué había sucedido realmente esa noche?

La verdad es que en su momento había obtenido una explicación del mayor y la razón por la que salió corriendo, pero ahora comenzaba a dudar si todo lo que el alto dijo era cierto o solo era lo que deseaba escuchar, porque al fin y al cabo, fue con él con quién se quedó y desde entonces han criado juntos a Juwoon.

El modelo abrió la puerta y arqueó sus cejas al encontrarse a Chanyeol tirado en el piso boca abajo con su hijo sentado encima de su espalda.

— ¿Qué están haciendo? — Baekhyun preguntó, llamando la atención de ambos Park.

El más alto levantó su cabeza y medio volteó, para ver al recién llegado, soltando una risa. Juwoon al oírlo, brinco felizmente sobre el hombre en el suelo.

— Hola, Baekkie, ¿sucedió algo? Pensé que llegarías en la noche. — Preguntó el diseñador desde su posición.

— Sí, tuve una reunión que salió bastante mal y decidí cancelar toda mi agenda. — Le respondió, acercándose y levantando al pequeño niño en brazos. — Hola, mi amor. ¿Por qué estabas arriba de papi?

— Cabato, cabato.

— Últimamente Juwoonie está algo fanático de los caballos. — Chanyeol mencionó sentándose con las piernas cruzadas, todavía en suelo. — ¿Deberíamos llevarlo a una granja para que conozca distintos animales?

Baekhyun lo miró desde arriba con el niño sobre su cadera y entrecerró los ojos, pensativo.

— Podría organizar un horario. ¿Te gustaría Wonnie ir a ver a los caballos? — El modelo beso la mejilla mochi de su hijo.

— SII, cabato, cabato.

Chanyeol aplaudió haciendo reír con felicidad al niño. Baekhyun sonrió, dejándolo nuevamente en el suelo y viendo cómo corría torpemente hacia el más alto.

Juwoon se abalanzó sobre el mayor y pasó sus bracitos alrededor de su cuello.

— ¿Ya almorzaron? — Baekhyun preguntó, comenzando a desvestirse para ponerse ropa cómoda.

— En realidad, iba a pedir comida en el restaurante que está en la otra calle, pero se me pasó el tiempo.

El modelo se volteó a verlo con una ceja levantada y desvió sus ojos al reloj en su muñeca.

— ¿Me estás diciendo que Juwoon todavía no comió?

Chanyeol abrió los ojos ante el tono amenazador de su pareja y sacudió su cabeza.

— Él sí comió, le hice puré de calabaza con pollo.

— ¿Y por qué tu no comiste lo mismo?

— Quería algo más condimentado. — El alto se rió avergonzado. Baekhyun rodó los ojos.

— Está bien, pediré comida para nosotros, Loey. — Vio como a Juwoon se le cerraban los ojos y señaló. — Ya es hora de que duerma su siesta, acuéstalo y ven a la sala, tenemos que hablar.

Aquello último tomó por sorpresa al más alto. ¿Hablar de qué?

— ¿Sucedió algo? — Chanyeol se levantó con cuidado con el niño en brazos, mirando la espalda de su pareja frente al closet. — ¿Baek?