El parque de atracciones está lleno, pero Shippo parece estar bien con el ruido. Es cierto que le consiguió unos tapones para los oídos y unos auriculares para Koushi. Kagome tira de la pequeña manta hasta que llega al pecho de Koushi. Él mira por la ventana del cochecito. Ella tiene su portabebés por si quiere tener una mejor vista de todo lo que está pasando. Koushi es bastante curioso.
_¡Sensei!_ gritan los estudiantes.
Kagome se detiene y mira por encima del hombro. ¿Por qué están tan rojos? ¿Pasó algo?
_Fue mi culpa_ suspira Satoru, retirando su mano.
Oh.
Satoru siempre la toca, siempre apretándole el trasero o apoyando su mano en su espalda baja. Satoru resopla y luego coloca su mano en su espalda baja.
Ella agacha la cabeza y sonríe. Sus entrañas están pegajosas como un rollo de canela. Estar con Satoru es un poco así. Cálido. Suave. Y cuando lo toma en su boca, él lo prueba. Kagome se sacude mentalmente. No es el lugar.
_¡Quiero subirme a eso!_;dice Shippo desde su lugar sobre los hombros de Satoru. Kagome sigue a Shippo y luego sacude la cabeza _¡Papá! ¡Vamos!
_No, tienes que quedarte en la atracción para niños_ No es que Shippo se lastime o se vea afectado por las atracciones más grandes, pero se supone que tiene seis años, y los niños de seis años no se suben a la montaña rusa más grande del parque. O tal vez sí. No importa, Shippo es pequeño y no pasaría el requisito de altura.
_Pero...
_Lo siento, amigo. Nos dirigiremos a la sección de niños. Hay muchos juegos a los que pueden jugar_ Satoru mira por encima de su hombro _Son libres de hacer lo que quieran y podemos reunirnos para cenar. A menos que quieran subirse a las atracciones más pequeñas.
_Nos veremos luego_dice Yaga, frotándose la nuca. Junto a él, los grandes ojos castaños oscuros de Panda aún no han parpadeado. Es tan alto como Yaga en la forma humana que Shippo le dio. Su cabello es negro con mechas blancas.
_Megumi_ susurra Shippo.
_No.
_Hermano mayor_ canta Shippo _sabes que quieres quedarte con la familia.
Kagome suspira _Shippo, Megumi quiere pasar el rato con sus amigos. Vamos, o no tendrás tiempo para ninguna de las atracciones_ Le lanza una sonrisa a Megumi, que parece muy aliviada. Los estudiantes los siguen un rato y luego se dividen en sus propios grupos. Una vez que están solos, Satoru se detiene.