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Ravi agitó por última vez la bolsa de plástico en sus manos antes de sacar sus llaves para abrir el departamento; era normal que al regresar del trabajo Pip ya se encontrara descansando en su hogar

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Ravi agitó por última vez la bolsa de plástico en sus manos antes de sacar sus llaves para abrir el departamento; era normal que al regresar del trabajo Pip ya se encontrara descansando en su hogar.

Lo que le sorprendió fue encontrar todo el lugar en completa oscuridad y sin ningún ruido, esperaba encontrar a la menor esperándolo pues le había traído algo de pasta y pizza, sin embargo, no parecía haber rastros de ella.

Se adentró con sigilo aún en la oscuridad y fue hasta su cuarto, encontrando a la castaña recostada en su cama, abrazando un peluche de Hello Kitty y con cara de pocos amigos.

—¿Qué ocurre, amor? ¿Qué haces tan escondida?

—Unos idiotas en el trabajo retrasaron la entrega de unos archivos y por su culpa ahora tengo que hacerlos yo.

—Ouuh, mi bebé está estresada; esos tontos fueron malos contigo.—Dejó la bolsa en la mesita de noche y abrió sus brazos a la menor que no tardó en lanzarse hacia el.

Pip podría verse ruda, algo fría y demás adjetivos algo toscos, pero la realidad es que cuando está con Ravi no es más que una niña pequeña que necesita ser cuidada y mimada.

—Tranquila amor, tú eres una mujer muy capaz, trabajadora y súper extraordinaria, estoy segura de que podrás hacer eso y más sin ningún problema. —Acarició delicadamente las mejillas contrarias antes de dejarle un casto beso en los labios. —Y puede que así finalmente tu jefa te de el ascenso que tanto te mereces.

—Eso espero, Ravi... —Un puchero se iba formando en su rostro hasta que vio el paquete de comida que su novio traía con el en manos antes de abrazarla.—¿Es para mí?—Pregunta al más alto mientras le ofrece su mejor sonrisa.

—Claro que sí, cariño.—Sonríe al sentir la euforia de la menor cuando esta lo abrazó antes de ir por su comida.

Ambos decidieron sentarse en el suelo de la habitación, acurrucados uno contra otro mientras disfrutaban de la deliciosa cena que tenían ese día y la agradable compañía de el contrario.

Puede que para la mayoría eso no fuera mucho, pero para ellos esos momentos eran los que valían la pena compartir y sabían que los recordarían con amor en un futuro; simplemente apreciando el tiempo que pasaban juntos, ya sea abrazados, besándose o incluso haciendo nada realmente importante, pero teniéndose entre sí.

Puede que para la mayoría eso no fuera mucho, pero para ellos esos momentos eran los que valían la pena compartir y sabían que los recordarían con amor en un futuro; simplemente apreciando el tiempo que pasaban juntos, ya sea abrazados, besándose ...

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Lo admito, con este si lloré :'(

Mimos | PipraviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora