Max y Astrid llevan años odiandose y trabajando en el equipo de Red Bull, pero ¿Qué es lo que se esconde detrás de tanto odio?
Después de un cambio de planes Astrid es ascendida como jefa de prensa para al equipo y deberá viajar con el equipo... y...
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📍 Suzuka, Japón.
No quiero ser la aguafiestas del grupo, pero siento que podría serlo. Lia se pasea nerviosa de un lado a otro en su habitación repitiendo que está tranquila aunque, tanto Hannah como yo, sabemos que no está nerviosa porque Charles vendrá con nosotros al café. Me sorprende que no lo haya cuestionado a Max de ninguna forma por haber invitado al piloto monegasco, pero creo que la situación la tomó tan por sorpresa como a mi.
No es que me sienta incómoda con la situación pero es extraño pasar tanto tiempo cerca de Max otra vez. Hasta hace un par de semanas, con suerte, lo veía una vez a la semana… ahora es extraño, como si retomaremos una vieja normalidad sin haber pasado años discutiendo e intentando evitarnos.
―¿Cómo crees que se pondría si tuviera una cita con Charles? ―me pregunta Hannah y observo en silencio a Lia mientras contengo una sonrisa.
―Nunca la había visto así, pero no creo que pueda ser peor ―respondo y Hannah ríe.
―Es adorable ―señala mi amiga y asiento de acuerdo con ella porque me recuerda un poco a mi.
―¿Deberíamos bajar y buscar a los chicos? ―pregunta Lia llamando nuestra atención.
―Tranquila, ya vas a ver a tu amorcito ―se burla Hannah.
―Charles no es mi amorcito ―se queja Lia y no puedo evitar reirme un poco.
―Nadie dijo nada sobre Charles ―señala riendo Hannah ―, yo me refería a los gatos del café ¿no dijiste que había uno en una foto que te enamoró? ―añade y Lia parece ligeramente avergonzada y nerviosa.
―¿Esto es porque invité a Max y no a Oscar? ―cuestiona Lia cambiando el tema de conversación y observo a Hannah que parece haberla tomado por sorpresa el comentario de nuestra amiga ―. Lo siento, pero nunca he hablado con Oscar, así que iba a ser raro si lo invitaba ―se explica ella y Hannah parece preferir quedarse en silencio.
―Pues Oscar hubiera sido mejor elección que Max ―señalo para alivianar el ambiente.
―Deja de quejarte, últimamente Max parece estar comportándose ―dice Lia y pongo los ojos en blanco.
―¿Cuánto crees que le durará? ―cuestiono molesta.
¿Qué? ¿Por que Max se ha comportado durante dos días seguidos ahora mis amigas van a estar del lado de Max? ¿Que paso con la lealtad? Comienzo a pensar que debería echarme atrás con toda esta tontería.
―Astrid, creo que tu tienes más problemas con Max que él contigo ―dice Hannah pero ignoro su comentario ―. Comenzaré a estar del lado de Max si sigues así, aunque prefiero esperar a ver cómo se comporta hoy―añade ella y volteo a verla.
―¡Te lo juro! ―exclama Lia ―. Parecía contento porque decidí invitarlo y entonces pensé ¿Por qué nunca hablamos con él?
―¿Por lealtad de amiga? ―cuestiono y mis dos amigas hacen una mueca.
