Harry Moore ES UN BASTARDO EGOÍSTA, ambicioso que engaña a su esposa, ignora a sus hijos y rutinariamente estafa a la gente que trabaja arduamente ganando su dinero, pero como jefe es bastante decente. Mientras le traiga mucho dinero, a él no le importa que haga o que tanto este en la oficina, lo cual ha sido de inmensa ayuda en los últimos ocho meses desde que mamá fue diagnosticada y me volví una Hija de Lideres contra el Cáncer. Aún he estado haciendo grandes negocios, con incluso más grandes clientes de izquierda a derecha, aunque haya estado haciendo casi todo mi trabajo desde varias salas de infusión.
Así que asumo que no será un problema cuando dejo un mensaje con su secretario de que no podré ir a la oficina este día, pero entonces me llega una llamada de su secretario Trent de inmediato.
- Buenos días, Srita. Jáuregui. - Trent el secretario se escucha un poco nervioso.
- El Sr. Moore dice que la quiere en su oficina lo más pronto posible. Algo grande ha surgido y es una emergencia.
Miro al otro lado de la habitación donde mi mamá duerme pacíficamente, rodeada por varios postes y cables y bolsas y pantallas.
Suspiro. - Mi madre está en el hospital en este momento. ¿Hay alguna manera de que pueda esperar?
- Espere un momento, preguntaré.
- Dice Trent y escucho los tonos del piano eléctrico de una canción de Liszt mientras me pone en espera. Entonces Trent regresa.
- Uh ¿Srita. Jáuregui? Lo siento mucho, pero el Sr. Moore dice que realmente necesita verla de inmediato y que no puede esperar. ¿Debo decirle que está usted en camino?
- Mierda. - Murmuro, pasando una mano por mi rostro. Miro mi arrugado esmoquin.
- Sí, estoy en camino. Tengo que pasar a mi casa para cambiarme, después voy para allá.
- Sí, señorita. Yo se lo haré saber.
Joder, maldita sea.
Cuelgo y me levanto, reacia a dejar sola a mamá. Hice que papá fuera a trabajar, él es gerente en un almacén de una pequeña empresa de plomería, y su jefe no está dispuesto a perdonar que papá falte por ningún motivo, incluso si se trata de que su esposa está enferma, y Ryan está en Lawrence, estableciéndose en su nuevo alojamiento fuera del campus. Aiden está en el trabajo. Y obviamente Christopher no está aquí.
Beso la frente fría de mamá y ella se remueve, pero no se despierta. Encuentro a una enfermera y le explico que debo ir a trabajar, pero que me llame si hay la menor señal de que algo va mal, y después procedo a dejarle el número de teléfono de cada persona en la que puedo pensar que debe contactar en caso de que no pueda comunicarse conmigo, aunque sí podrá contactarme. Moore entenderá si tengo que salir de nuestra junta de repente, estoy segura.
Mayormente segura.
Como, la mitad de Segura.
Mierda, tal vez no estoy nada segura. Pienso todo esto mientras llego a mi coche y me apresuro a mi departamento, dando golpecitos con mis dedos en el volante con ansiedad. Es legítimamente la primera vez que cuidar a mamá ha sido un problema con mi trabajo, y tengo que admitir que, aun sabiendo que Moore es un cabrón, estoy sorprendida de que haya insistido que fuera ahora. Trent dijo que era una emergencia, pero ¿qué jodida emergencia de inversión es más importante que una emergencia quirúrgica de mi propia madre?
Y después me siento una idiota, porque no he conseguido las cantidades de dinero que he ganado,haciéndome ese tipo de preguntas. Siempre, siempre he puesto el trabajo primero, al menos antes de la enfermedad de mi madre. Y aún después, he hecho lo mejor posible para darle a esta firma cada parte de mí que no esté atada por las responsabilidades de quimio-chofer y visitas a la farmacia. Si Moore dice que es una maldita emergencia, entonces le creo y necesito arreglarlo, lo que quiera que sea.
