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Saben, el poder es debería de utilizarse para que todos se arrodillen ante ti. Para que todos te obedezcan, te rueguen y te supliquen por algo. El poder que las personas influyentes tenían era increíblemente malo, soberbio.
Pero, para la hija del mayo el poder dejó de ser importante cuando su mundo se vino abajo.
Dejo de importarle todo cuando conoció a aquel que tantos conocían como el increíble jefe de seguridad de los chapitos. El más poderoso de todos.
Él le era fiel a ellos, el poder que él tenía se lo entregaba a ellos. El arriesgaba su vida por ellos. Y a pesar de que le pagaran por eso para él la lealtad era lo más importante.
Pero la lealtad valió madre cuando conoció a aquella mujer que aún que era de poca estatura, era muy imponente.
Ella lo gobernaba, ella tenía ese poder en el.
Ella tenía el poder.
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10-agosto 3:45 am
Maday ya se encontraba justo en el lugar donde marcaba la dirección.
Era raro, pues no había nadie, ni nada.
Solo un pequeño cuarto. Que no se veía por la oscuridad pero por las luces de su auto ella alcanzó a verlo.
Tenía miedo aún que era valiente, quien fregados no tendría miedo en un lugar alejado a las tres de la madrugada y además sola. Una mujer sola en un lugar así.
El amor la hizo valiente, pero digo, a estas alturas Mad seguía pensando que era Néstor el que la había citado en un lugar así?
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Había un nudo formado en el pecho de la chica, no podía expresar nada.
Como le haría viendo lo que acababa de ver.
Dos cuerpos totalmente destrozados. Sangre por todos lados. Con la luz de su celular alumbró los cuerpos, sus ojos, no había ojos. Las caras no tenían ojos.
Corrió a su auto y se encerró en este, ni siquiera encontraba las llaves del desespero.
