★𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟏★

43 10 9
                                    

Rainbow

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Rainbow

★★★★

El día de la presentación había llegado, y Ai se preparaba en el vestidor junto a Rei, la madre de Yumi. Ambas compartían una mezcla de nervios y orgullo, pero en los ojos de Rei brillaba una emoción especial. Saber que Yumi, después de tanto tiempo, volvería a bailar era un motivo de felicidad indescriptible para ella. Rei había planeado una sorpresa con gran cuidado y emoción, y para que todo saliera perfecto, necesitaba que Ai finiera estar al tanto de todo. Ai, sonriendo con complicidad, ayudó a ser parte de la pequeña travesura, deseando que aquel momento fuera inolvidable para Yumi.

FLASHBACK

Era una tarde tranquila en casa, y la semana en la que Yumi había estado con los Hoshino ya había pasado. Ahora de regreso a su habitación, Yumi sintió que no podía contenerse: el deseo de bailar estaba ahí, como una chispa que se negaba a apagarse. Así que se levantó, moviendo sus brazos con la misma sutileza que veía en Ai, mientras seguía el ritmo en su mente.

Con cada paso, Yumi mantenía la vista en sus pies, moviéndolos con cautela para no torcer su tobillo, sintiendo cómo su cuerpo respondía a la música imaginaria. Su pierna, firme y grácil, acompañaba el vaivén de su cadera, y sus manos intentaban sincronizarse en una especie de danza llena de concentración y esperanza. Cuando, finalmente, logró unir esos movimientos en una pequeña secuencia, Yumi se entusiasmó ampliamente, sus ojos chispeando de alegría.

Por un momento, el dolor que siempre le recordaba su límite físico se desvaneció.

Yumi sentía que la felicidad aún podía existir en su mundo, a pesar de las sombras que a veces empañaban sus días. Mientras practicaba unos pasos de baile, con una sonrisa genuina en su rostro, un leve temblor la recorrió al escuchar el crujido de la puerta abriéndose lentamente. La tensión en su cuerpo se relajó solo un poco al ver que era su madre, Rei, quien estaba de pie en el umbral, observándola.

—Yumi, mi amor, ¿qué haces? —preguntó Rei con una sonrisa llena de ternura y preocupación.

Yumi la miró con una seriedad que parecía hacer eco de todo el resentimiento que aún sentía. Las palabras de su madre cuando llamó "estúpida" a Ai habían quedado grabadas en su memoria como una herida abierta. Sentía que su mamá nunca podría entender lo mucho que Ai significaba para ella, y cada vez que recordaba aquel comentario, el dolor volvía a su pecho, como una espina clavada que no podía quitarse.

—Nada —respondió Yumi secamente, bajando la mirada para evitar el contacto visual.

La sonrisa de Rei se desvaneció, y sus ojos revelaron una tristeza profunda. Con preocupación, se acercó y se arrodilló junto a su hija, buscando sus ojos, queriendo llegar a ese rincón de su corazón que sentía cada vez más distante.

—Mi amor, ¿qué tienes? —preguntó, alargando la mano para acariciar el rostro de Yumi, intentando reconectar con ella. Pero la niña apartó su mano bruscamente, el gesto tan frío que Rei sintió como si le hubieran dado una bofetada. Volvió a intentarlo, con más cuidado, pero nuevamente fue rechazada.

★彡𝐑𝐞𝐩𝐥𝐢𝐜𝐚 𝐃𝐞 𝐔𝐧𝐚 𝐌𝐞𝐧𝐭𝐢𝐫𝐚彡★  𝐁𝐨𝐨𝐤 #𝟏 ᴬ૧ᵘᵃ ᴴᵒˢʰⁱⁿᵒDonde viven las historias. Descúbrelo ahora