Advertencia: mención de muerte, heridas, violencia
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La vida no se detenía después de una despedida, las cosas tendían a seguir un curso de nueva normalidad, eso le había pasado al equipo sorprendiéndolos con la incorporación de un nuevo miembro. Ciertamente era algo que podían imaginar que pasaría luego del fallecimiento de Cat, pero estaban lejos de aceptar darle bienvenida a alguien más por lo que tenían demasiadas emociones al respecto.
En su primer día, a pesar de las palabras de ánimo que le había brindado Gibbs, Gia no pudo evitar sentir la cantidad de miradas contradictorias que estaba dándole el resto de sus compañeros, sabía que su bienvenida no sería con platillos y trompetas, pero al menos no esperaba tanta tensión.
Las primeras semanas había sido realmente difícil ignorar las constantes miradas, pero casi al final de su primer mes podía sentirse un poco satisfecha de que al menos ahora la saludaban con un poco más de amabilidad, las miradas recelosas seguían...pero el tono ahora era un poco más suave.
Por recomendación de Gibbs no se había atrevido a visitar aun el laboratorio para conocer a la médica forense, Abby Sciuto, por lo que pudo escuchar era demasiado cercana al igual que Tony a la agente que la precedió, así que su presencia seguramente seria todo menos agradable.
- Señores tenemos trabajo que hacer – Gibbs observó a sus compañeros – Ziva y DiNozzo los necesito en la primera escena del crimen, McGee conmigo para la segunda – miró a la novata – Forbes necesito que acompañes a Abby por hoy ¿sí?
- Sí, señor – asintió sintiendo sus nervios crecer un poco
- Enviar a la novata con Abby en su primer mes, pensé que la querías con nosotros más tiempo Gibbs – Tony se burló un poco más ácido de lo que pretendía
- Ella puede manejarlo
Honestamente Gia no lo entendía pues Ziva había ingresado con ella un día después, sin embargo, todos la trataban como una amiga más que como un intruso que llegó luego de perder a alguien. Podía entender que ella llegó primero a la línea de tiro, muy mal ejemplo, pero si hubiera sido al revés quizás no serían tan crueles al respecto.
Antes de dirigirse hacia el laboratorio recordó que cerca de la agencia solían vender una de sus bebidas favoritas, está tenía demasiado café "Caf-Pow", con una de esas por semana se sentía con tanta energía que podría detener un camión con sus propias manos. Así que consiguió una para Abby y otra para ella, con la intención de darle ánimos para el trabajo al que debían enfrentarse por ese día, cuando entró al laboratorio se sorprendió de lo hermosa que era la mujer que no dejaba de moverse de un lado al otro.
- Hola...Gibbs dijo que podía ayudar aquí hoy – se acercó con cautela observando la mirada de la mujer subir por su cuerpo – soy...
- Sé quién eres, no necesito ayuda – cuando su mirada se enfocó en la bebida frunció su ceño – no vas a comprar mi simpatía trayendo mi bebida favorita
- ¿De verdad es tu favorita? – estaba sorprendida de que alguien más que ella pudiera consumir tanta cafeína –
- Sí, por eso la trajiste ¿verdad? – su ceño tambaleo un poco aun manteniendo la distancia – porque Gibbs te dijo que lo hicieras
- No realmente – se acercó dejándola sobre el mostrador antes de darle un sorbo a la suya – es mi favorita, así que compré dos pensando que podía darte energías para el caso de hoy
- Espero que no me estés mintiendo, Forbes – apuntó con su dedo antes de tomar la bebida – gracias
- No hay problema – había regresado al marco de la puerta – entonces ¿puedo ayudar en algo?