Una Obsesión Inquebrantable FINAL FELIZ

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Daphne se quedó inmóvil, su mirada alternando entre la furia y el desasosiego. "¿De verdad creen que pueden alejarme de ti?", murmuró, casi para sí misma. El viento arrastró su voz, pero la tensión en el aire era palpable.


Tú, con el corazón aún latiendo con fuerza, sentiste cómo la adrenalina te empujaba a actuar. "Daphne, no tengo miedo de ti. No soy un objeto para ser poseído", le dijiste, firme en tu decisión.


Fred y Velma intercambiaron miradas, preparados para cualquier reacción. Shaggy, un poco más al margen, masticaba nerviosamente un bocadillo, pero su mirada reflejaba preocupación. "Tal vez deberíamos llamar a alguien. Esto está... yendo demasiado lejos", sugirió."¡No necesitan a nadie!", gritó Daphne, su voz resonando en la noche. "Yo solo quiero proteger lo que es mío. ¿No entienden? Sin ti, no soy nada".


"Eso no es cierto", respondió Velma con calma. "Tú eres mucho más que eso, Daphne. Esta no es la forma de mostrar amor". Daphne se acercó, el pánico en sus ojos se transformó en una resolución fría. "Entonces tendrán que aprender a respetar lo que he creado", dijo, y de repente, sacó un pequeño dispositivo de su bolso. Era un pequeño control remoto que iluminó su rostro con una luz brillante. "No saben en qué se están metiendo".


En un instante, una serie de luces parpadeantes se encendieron alrededor de la mansión, y sonidos extraños comenzaron a resonar. "He preparado algunas sorpresas para mantener a los intrusos alejados. Este lugar está lleno de trampas", explicó con una sonrisa perturbadora."¡Daphne, esto no es un juego!", gritaste, pero ella ya había presionado un botón, y el suelo tembló ligeramente bajo tus pies. Unas cajas se abrieron de las sombras, revelando dispositivos de seguridad que parecían preparados para defenderla a toda costa.


La situación se tornó caótica. Las luces de la mansión comenzaron a parpadear, y de pronto, los amigos comenzaron a separarse, tratando de evitar las trampas que Daphne había colocado. Fred corrió hacia una puerta, mientras Velma intentaba desactivar un mecanismo que había comenzado a girar. Shaggy, por su parte, gritaba y se escondía detrás de un sillón viejo."¡Daphne, basta!", le gritaste, sintiendo cómo la desesperación comenzaba a crecer en ti. "Esto no solucionará nada. No necesitas hacer esto".


"Pero tengo que hacerlo", replicó, su voz casi quebrada. "No puedo perderte. No otra vez".Te armabas de valor, tratando de recordar los momentos que habías compartido con ella, buscando la forma de llegar a su corazón. "No me has perdido, Daphne. Solo necesito que entiendas que el amor no puede ser posesivo. Debe ser libre".


Su mirada titubeó, y por un instante, pareció dudar. Pero, justo entonces, un sonido metálico resonó, y una trampa se cerró, separándote de tus amigos. La adrenalina corrió por tus venas mientras veías cómo el pánico regresaba a sus ojos.


"¡No, no, no!", exclamó, presionando el botón una vez más. "Esto no debería estar sucediendo". El ambiente se tornó cada vez más tenso, y las luces comenzaron a parpadear con más intensidad.Tú sabías que debías actuar rápido. Con determinación, te acercaste a ella. "Daphne, eres más fuerte de lo que crees. Lucha contra esto. No puedes dejar que el miedo controle tu vida".A medida que te acercabas, la luz en sus ojos comenzó a cambiar. "Yo solo quería que fueras mía", susurró, sus manos temblando mientras dejaba caer el control remoto.


El silencio se instaló, y el eco de los dispositivos apagándose llenó el aire. Tomaste su mano con suavidad, y por un momento, el mundo pareció detenerse. "Podemos encontrar una manera de resolver esto juntas. Pero debes dejarme ser libre".


Daphne se quedó quieta, la tristeza y la confusión reflejadas en su rostro. "¿Realmente crees que puedo cambiar?", preguntó, su voz apenas un susurro."Sí", respondí con sinceridad. "Pero solo si te lo permites".Con un profundo suspiro, su mirada se suavizó, y lentamente asintió. "Te prometo que intentaré... por ti". Y así, entre la oscuridad de la mansión y las sombras del pasado, decidiste que había esperanza. Aunque la lucha contra la obsesión no terminaría de inmediato, al menos ahora tenían un camino hacia la redención. La noche caía sobre Crystal Cove, pero dentro de ti había un destello de luz, un nuevo comienzo en un mar de incertidumbre.


Con el tiempo, sabías que necesitarían ayuda para reconstruir lo que se había perdido, pero por ahora, lo más importante era que estaban juntas, dispuestas a enfrentar lo que viniera.


Yandere one shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora