Depuración [Flufftober 2024 | DynaMeistershipping]

Traje

Sou se acarició la barbilla con las yemas de sus dedos. Sus ojos rodaban entre las dos ventanas que estaban en su computadora. Una de ellas era un portal web, algo estilizado, donde se anunciaba la aparición de un famoso herrero, de la región de Unova, visitando la región de Galar.

Sou conocía bien ese rostro jovial, lo había visto desde niño cuando su padre hablaba de él con un extraño brillo en los ojos, una emoción tal que le fue heredada al momento de volverse un armero. Conocía bien su reputación, su increíble habilidad de convertir un simple lingote de hierro en una hermosa espada afilada con la cual podía cortar hasta las más duras piedras. Giró su vista a su librero, cubierto por una caja de acrílico, estaba una navaja que había logrado comprar en una subasta. El detalle de la hoja aún le hacía sentir cosquillas, un trabajo impecable, su modelo a seguir cada que le hacían algún pedido. Quería ir a verlo, conocer su trabajo, que le firmara su daga y, tal vez, que le diera algunos consejos para mejorar su técnica.

Sus ojos volvieron a la pantalla, fijándose en la otra ventana. Era su aplicación de mensajería con Schilly. Bajo el nombre de contacto de "Casey", la chica había enviado varios mensajes, emocionada, usando muchos "emojis" y "stickers" graciosos a los cuales Sou se les escapaba su humor, pero entendía a qué se referían cuando ella enfatizó su mensaje más importante.

"Mañana me entregarán un premio en la compañía :000.
Será una fiesta elegante UwU, y me harán decir un discurso :s
No sé si den comida buena xd, pero la verdad estoy muy emocionada, nunca me habían dado algo UwU *c emociona*

Te diría que puedes ir si quieres, pero sé que te incomodan esas cosas, y los trajes, así que si no quieres está bien c:"

Había algo en ese último mensaje que le incomodaba, pero no sabía por qué. Era cierto, odiaba las fiestas elegantes, más que otra cosa, el protocolo social, la comida, el ambiente, y sobre todo, usar un maldito traje incómodo que le hacía tener comezón en todo el cuerpo, deseando quitárselo de golpe y mejor estar desnudo en la maldita ceremonia.

Ambos eventos eran, para su desgracia, el mismo maldito día, a la misma maldita hora: seis de la tarde. Aunque en un principio pensó en ir a su convención, algo le hizo sentarse y reflexionar por horas cuál era el camino a decidir. Sí, Schilly le había dicho que no había problema, y era lo más lógico, pero algo dentro de él le decía que no, que no estaba siendo sincera, y que debía estar ahí con ella, aunque no se lo hubiera pedido.

¿Por qué lo sentía así? Ella misma lo expresó, sabía que ese sujeto vendría por primera vez a la región y sería su última oportunidad, ¿Por qué sentía que si lo hacía la haría sentirse mal? No lo comprendía, sólo sentía una presión en su pecho al ver su guardarropa y mirar la ropa casual que pensaba tomar. Dio un fuerte respiro, intentando pensar en alguna otra ocasión donde algo hacía había ocurrido antes, en su relación, pero no recordaba nada en concreto, nada, y esa misma ausencia le hizo darse cuenta de algo que le hizo sentirse mal... nunca había estado con ella en ningún evento.

Tragó saliva, jamás se había tomado la molestia de acompañarlo, de estar ahí con ella, siempre había otra cosa, algún otro interés que resultaba ser "más importante" que un discurso o un reconocimiento sin chiste. Siempre había algo, y aunque no lo veía del todo mal el no ir con ella, por dentro se sentía como si fuera un idiota.

Apretó el tabique de su nariz con molestia, desesperado. En esos momentos deseaba ser como la demás gente, esa mucha gente que podía tomar decisiones como estas de manera simple, que sabían que era lo correcto y lo incorrecto. Se maldijo así mismo que algo tan fácil fuera tan difícil. Molesto, sacó los dos conjuntos de ropa: el traje, junto a una flor que Bede le había dado para que se la diera a Schilly, y su ropa casual. Suspiró, intentando cuestionándose que debía hacer. De pronto solo lanzó un suspiro derrotado y decidió tomar una decisión.