𝗛𝗜𝗚𝗛𝗪𝗔𝗬 𝗧𝗢 𝗛𝗘𝗔𝗩𝗘𝗡 ー Genshin Impact Smut.

28. 𝗞𝗶𝗻𝗶𝗰𝗵.

Saturday Drip.

Advertencias: mordidas, corrida, Kinich quejoso

Palabras: 490

Créditos: @/vraiao en Tumblr.

Él está tratando con todas sus fuerzas de follarte lentamente, empujando a un ritmo áspero e inestable con un agarre contundente en tus caderas mientras su polla besa tu punto dulce cada vez que mueve sus caderas hacia adelante después de tirarlas completamente hacia atrás. Kinich se enorgullecía de mantener la compostura en situaciones desesperadas, muy parecidas a ésta. Entonces, se preguntó por qué le resultaba tan difícil hacer exactamente eso ahora. ¿Fue la forma en que tu coño se apretó tan perfectamente alrededor de él? ¿O el sonido de tus gemidos de su nombre que llenaron la habitación?

Manteniendo su ritmo lento, aunque inestable, le faltaban segundos para soltar todo el (aún escaso) autocontrol que le quedaba y follarte como a un animal rabioso. Se inclinó hacia adelante, mordiendo varios puntos de tu cuello con suficiente fuerza como para dejar marcas para intentar anclarse. Te quejaste, tus manos se enredaron y tiraron de su cabello mientras él continuaba mordiendo.

Estaba perdiendo la cabeza por completo, gimiendo en tu piel cada vez que se hundía por completo en ti. Mirando sus bonitos ojos cada vez que levantaba la cabeza para morderte, verlo tan concentrado pero desenfocado debido a cómo tú solo lo hacías sentir, solo apretó el nudo en tu estómago. Fue cuando acercó una mano hacia tu clítoris para pellizcarlo y girarlo entre las yemas de sus delgados dedos que realmente perdiste el control.

Tus ojos se pusieron en blanco y tu visión se volvió irregular cuando tu orgasmo te invadió, un gemido de su nombre saltó de tu garganta mientras tu excitación ensuciaba toda su polla.

Eso le hizo perder el control de inmediato. Sus uñas se clavaron en la grasa de tus caderas, acelerando sus embestidas imperceptiblemente mientras gemidos apenas coherentes y desesperados de tu nombre salían de su boca. Tus gemidos solo se hicieron más fuertes y echaste la cabeza hacia atrás contra las almohadas mientras tus ojos se ponían en blanco. "No, no", suplicó Kinich, "mírame bebé, por favor mírame".

Sus embestidas eras ásperas y necesitadas mientras perseguía su clímax, gemidos sobreestimulados y lloriqueos altos que salían de tu boca mientras te aferrabas con fuerza a sus hombros para tratar de estabilizarte. Su cabeza colgaba baja, su cabello largo le hacía cosquillas en la cara mientras gemía descaradamente en tu oído. Su aliento era caliente sobre tu piel, los sonidos de placer que emanaban de su boca eran casi suficientes para hacerte correrte por segunda vez.

Comenzó de nuevo con besos desordenados y lamidas por todo tu cuello, pasando a mordiscos mientras gemía desesperadamente en tu piel. Unos cuantos empujones más fuertes y te mordió con fuerza el hombro, gimiendo fuerte mientras se deshacía. Él se estaba corriendo con fuerza dentro de ti, el ritmo vertiginoso finalmente disminuyó mientras él inestablemente follaba su subidón antes de detenerse por completo, ambos jadeando pesadamente y tratando de recuperar el aliento.

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hola volví