Amor Interesado

Capitulo 12

La mansión Potter estaba llena de vida esa noche, con todos reunidos para una cena familiar especial. James y Lily Potter habían organizado un evento íntimo, invitando a amigos y familiares cercanos. A la mesa estaban los Weasley, los Malfoy, Remus Lupin y su esposa Cleare, junto a los abuelos de Harry, Dorea y Harold Potter.

Harry, como siempre, estaba en el centro de la atención, compartiendo anécdotas de sus últimas conquistas y éxitos deportivos. Draco y Ron lo acompañaban, bromeando y riéndose entre ellos. Mientras tanto, Ginny y Luna escuchaban la conversación desde el otro extremo de la mesa, aunque a Ginny le costaba disimular su desinterés.

De repente, James Potter irrumpió en el comedor con una sonrisa amplia y una cinta de video en la mano.

—¡Atención, todos! —anunció James—. He traído algo que no pueden perderse. Es un video muy especial de mi ahijada, Hermione.

Los cuchillos y tenedores se detuvieron en el aire. Los Weasley, los Malfoy y los Lupin intercambiaron miradas curiosas. Había pasado mucho tiempo desde que alguien en esa sala había visto a Hermione. Después de que ella y sus padres se mudaron a Argentina, su vida había quedado algo difusa para la mayoría. Excepto para James y Lily, quienes habían mantenido contacto cercano con ella.

—¿Hermione? —preguntó Ginny, extrañada—. ¿Qué ha sido de ella todo este tiempo?

—Verán lo que ha sido de ella —respondió James, colocando el casete en el reproductor de video mientras sonreía de manera cómplice hacia Lily, quien sabía lo que estaba por venir.

La pantalla parpadeó y apareció la imagen de un programa de televisión argentino. Hermione, radiante, caminaba por una pasarela con una elegancia y confianza que ninguno de los presentes le habría atribuido. Estaba vestida con un atuendo moderno, su cabello brillaba bajo las luces, y su porte era imponente. Luego, la música comenzó, y su voz suave pero poderosa llenó la habitación, dejando a todos sin palabras.

Esto canto Hermione.

Narrador Omnipresente

Harry Potter: "¿Qué demonios...?" pensó Harry, su arrogancia tambaleándose por un instante. Años atrás, Hermione no era más que una niña boba. Ahora, ahí estaba, convirtiéndose en el centro de atención en una esfera que él ni siquiera había considerado. El resentimiento y la sorpresa se mezclaban en su interior. "¿Por qué no me dijo nada de esto? Siempre creyó que su vida era aburrida comparada con la mía... Parece que ya no." Harry cruzó los brazos, fingiendo desinterés, aunque por dentro su orgullo estaba herido. "Bien por ella, supongo, pero esto no cambia nada. Yo sigo siendo el mejor."

James y Lily Potter: James se inclinó hacia adelante, sonriendo de oreja a oreja. "¡Mira a nuestra chica! Sabía que Sirius estaba ayudándola, pero esto es impresionante." Aunque siempre había sentido un vacío desde que Hermione se fue, James no pudo evitar sentirse profundamente orgulloso de su ahijada.

Lily, por su parte, estaba emocionada hasta las lágrimas. "Mi niña... está logrando tanto, y ni siquiera estamos cerca para verlo de primera mano." Sabía que Hermione había encontrado su propio camino lejos de ellos, pero ahora lamentaba no haber estado más presente. "Ojalá Harry pudiera verla como la vemos nosotros."

Remus y Cleare Lupin: Remus observaba en silencio, su sonrisa era serena. "Siempre supimos que Hermione tenía potencial, pero esto... es increíble." Aunque la distancia física los había mantenido alejados, Remus siempre la consideraba una sobrina.

Cleare, con lágrimas en los ojos, susurró: "Está preciosa, Remus. Hermione ha crecido tanto, y su talento... su voz. Estoy tan orgullosa de ella." Para Cleare, Hermione siempre había sido como una hija, y verla florecer de esa manera llenaba su corazón de felicidad.

Draco Malfoy: Draco alzó una ceja con escepticismo, aunque estaba impresionado por lo que veía. "Así que Granger ha dejado de ser una ratona de biblioteca para convertirse en una estrella. Quién lo hubiera dicho." Aunque tenía cierto respeto por su éxito, no podía evitar sentir un poco de envidia. "Está bien, pero eso no la hace parte de nuestro mundo. Todavía tiene mucho que demostrar."

Narcisa y Lucius Malfoy: Narcisa, con su habitual frialdad, observaba con una mezcla de interés y cautela. "Es sorprendente lo que esa niña ha logrado. Aunque sigue siendo familia lejana, ahora parece más digna de llevar el apellido Black." Lucius, por otro lado, apenas mostró reacción, pero en su mente, ya pensaba en cómo esta nueva faceta de Hermione podría influir en su posición social.

Ron Weasley: Ron estaba atónito, con la boca entreabierta. "Hermione... ¡wow!" Recordó los días en los que la maltrataban, pero ella ahora parecía tan distante, tan diferente. "Es difícil creer que esa es la misma chica que solíamos humillar." 

Ginny Weasley: Ginny observó la pantalla con admiración. "Siempre supe que Hermione era especial, pero esto es otro nivel." Aunque nunca fue cercana a ella, Ginny sintió una chispa de admiración por la valentía y el éxito de Hermione. "Debería haberla conocido mejor cuando éramos más jóvenes. Ahora parece tan... fuera de alcance."

Luna Lovegood: Luna sonrió suavemente, su mirada soñadora fija en la pantalla. "Hermione siempre fue una mariposa esperando salir de su capullo." Aunque sus caminos habían sido diferentes, Luna sentía una profunda alegría por el éxito de Hermione, sin la envidia que otros pudieran tener. "Es hermoso verla finalmente mostrarle al mundo lo que es capaz de hacer."

Dorea y Harold Potter: Dorea suspiró, su expresión rígida. "Tanto alboroto por una niña que apenas pertenece a esta familia." Siempre había considerado a Hermione una intrusa, alguien que no merecía el prestigio de los Black. Harold, igualmente indiferente, pensaba: "Sigue siendo una niña que nunca estará a la altura de lo que significa ser un verdadero Black" Para ambos, Hermione no significaba más que una distracción.

El Silencio y las Reacciones

Cuando el video terminó, la sala quedó en silencio por unos momentos. Fue James quien rompió el mutismo.

—Bueno, ¿qué les parece mi ahijada? —dijo con una sonrisa orgullosa, mirando directamente a todos los presentes.

Remus asintió, visiblemente emocionado. "Ella es increíble, Sirius. Gracias por cuidar de ella."

Harry, sin embargo, seguía callado, su mente aún procesando lo que había visto. "Hermione ha cambiado... pero no me importa. No me afecta." Se repitió a sí mismo, aunque algo dentro de él se sentía diferente.