Promesas En Días Equivocados

Prefacio

Esto no es una historia de amor.

Cuánta más segura estoy de que algo suceda, más quedadizo es el tiempo.
Se inmoviliza mi cuerpo, mi pulso se acelera, mi respiración se agita, comienzo a correr, el volumen de la música crece, la gente va lento, mis ojos chillan, mis labios se resecan, mis pensamientos paran.

Te veo.
Mírame.
Observa mis inseguridades.
Lee mis pensamientos.
Escucha mis latidos.
Soy yo.
Sé tú.
Nosotros.

-Nía.

2022 octubre

En ningún momento imaginas la posibilidad de conocer y amar a alguien aleatoriamente dentro de 100 notificaciones, incluso tampoco que un vídeo llegaría tan lejos, menos que fueras tan curiosa.

Vivimos en la misma ciudad, estuvimos en los lugares exactos, casi las fechas iguales. Tan lejos y tan cerca, será nuestro lema.
Félix, nunca escuché aquel nombre, y por años, se volvió mi palabra favorita.

Escribí primero, fue un "Hola" a lo que recuerdo.
Mi memoria se borró de ahí en adelante, pero los siguientes recuerdos hermosos, fueron semejablemente hirientes.

Los primeros meses fueron bellos, palabras compartidas con el deseo de conocerse, no fueron preguntas como ¿Cuál es tu color favorito? Compartimos más de música, del deseo de estar juntos.
¿Qué me enamoro de ti?
¿Tú estuviste enamorado de mí?

Conocer a alguien sin tenerlo en frente, es como saber dónde está algo, pero no ir por ello.

No sabes si en realidad conoces a la persona, si los momentos que comparten contigo son reales, tampoco si en realidad tiene un vivo sentimiento por ti.

No le muestras tus inseguridades y en lo personal a mí me dan miedo tantas cosas.
Me da miedo no ser suficiente para esa persona y que cuando me vea, me rechace por completo, es importante recordar que esto es una nueva forma de idealizar a las personas, para bien o para mal.
Le pones prejuicios al nombre, pero también sientes que por todo lo bello que comparten, es una gran persona.

Y vuelvo a lo mismo, todo es incierto, sobrepienso su querer y me hundo en mi ignorancia.

Las personas pueden juzgar desde afuera, pero mi explicación siempre será "Nadie lo conoce tanto como yo"
Y quizás no es así, lo conozco tan poco, solo lo que me muestra, quizás puede ser un maldito criminal (y yo enamorada de él).
Dejando de lado eso, es obvio que también yo le miento.

Me creé una obsesión por él, del tanto amor puedo darle que mejor no le doy.

Mi estúpida forma de amar es cruel, si tan solo se diera cuenta de lo jodida que tengo la mente. Buscó un salvador, alguien que no le teme al monstruo que construyó.