Despertó en medio de la calle confuso...
¿Que hace ahí?...
¿A donde va? ...
¿Porque hay tanta comida en la calle tirada? ....
Ja que raro...
Alto, alto alto Alto Alto
él no debería estar aqui... Caminando entre tanta gente
tiene una cita, o no?, est...
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Se empezaban a escuchar los cantos de los grillos que llamaban el atardecer en la ciudad, una calma infernal se encontraba por las calles y los semáforos aún marcaban con un semi sonoro tack el cambio de de focos, pero solo se encontraba el color rojo funcionando, había uno que otro auto bloqueado la entrada de la calle y las manchas de sangre ya entraban en un color café sucio oxidado y las primeras gotas de las lluvias invernales estaban anunciando su llegada.
Grimm miraba con extraña calma a su nuevo amigo tomar un aperitivo... Que para el particular caso de Ortho se trata de un zombie que le faltaba la parte inferior del cuerpo, su sangre negruzca y tripas grisáceas se estaban desparramadas por todo el suelo mientras que el pequeño niño zombie se daba gusto chupando lo que quedaba de la sangre y el tuétano estando del fémur acaba de romper para luego meter su mano entre las tripas y buscar los organos que mas le gustaban para comer.
-.... Eemm... ¿Tenías hambre verdad?- Pregunto Grimm sintiendo un escalofríos recorrer su espalda
-¡Siii!.. ¡Or..Ortho mucha hambre, esto rico!- Dijo el pequeño con emoción llevando lo que parecía ser el hígado de este muerto a la boca, pero se detuvo un momento, miró a Grimm con la boca llena y le ofreció lo quedaba del órgano -¿Quieres?- Preguntó con amabilidad, ya que aún resuena en su mente las enseñanzas de su madre que siempre debe compartir sus golosinas con su hermano y otros niños.
-Aaahh... No gracias, no me gusta el hígado...- Respondió Grimm negando con las manos -Mejor ire a buscar agua y más comida por la tienda- Se apresuró a hablar antes de que su amigo muerto-no-muerto le ofreciera otra parte del cuerpo.
El par de niños no se esperaban que encontrarán retos tan pronto en su aventura cuando salieron del edificio de departamento, sobre todo considerando que los zombies se alejaban cuando notaban la presencia de Ortho, Grimm pensaba que quizás su nuevo amigo es un repelente de muertos andares vivientes, hasta que llegaron Oxxo de la esquina y al entrar por la existente puerta de vidrio se encontraron de frente con un zombie con el clásico uniforme de la tienda de frente.
Este no muerto ya se iba ir por Grimm, que se quedó paralizado del susto de ver a un conocido con ese horrible aspecto, si no fuera porque Ortho actúo más rápido y a diferencia del zombie más grande que tenía un movimiento algo torpe por que arrastraba una de sus piernas rotas, el pequeño Ortho estaba completo y con mucha mejor masa muscular, así que saltó al ataque contra su adversario, tirándolo contra el suelo y con con solo la fuerza de sus manitas le reventó la cabeza, desparramando los sesos extremadamente rojizos aún por piso, fue cuando aprovechó para tomar un pequeño aperitivo.
Grimm meditaba en eso mientras echaba las pocas bolsas de botanas que había en las repisas casi vacías -Parece que Ortho es de los zombies que comen otros zombies, eso es muy bueno, significa que no nos comerán a mi hermana o a mi... Aunque... ¿Me pregunto si Idia solo comerán zombies también?- Se preguntó a sí mismo con curiosidad-
