Juanjo, integrante de la banda del momento Apolo 16 se encuentra siendo besado por un supuesto fan que se ha colado en su camerino a mitad del concierto.
Martin, fan de la banda, acaba siendo contratado por esta para ser su diseñador gráfico, ni él...
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La luz que se colaba por la ventana hizo que sus ojos se fruncieran ante la molestia, colocando uno de sus antebrazos por encima para intentar que la luz cegadora no le molestara. Incluso tuvo la iniciativa de levantarse de la cama para ir a poner la maldita cortina que el menor olvido de poner. Al final se iba a decantar por traer un puto antifaz para dormir, no era la primera vez que los rayos de luz matutinos adelantaban su despertar, y eso solo ocurría cuando el menor dormía con él y se encaprichaba en tener las ventanas descubiertas para recibir los mismos primeros rayos de sol que Juanjo detestaba.
No obstante, cuando el mayor quiso moverse, notó como un peso muerto encima suyo se lo impidió, y entonces fue cuando se dio cuenta del calor corporal del otro y de la mata de pelo castaña que al abrir los ojos le impedía ver mucho más allá.
Martin estaba durmiendo encima suya, apoyado encima de su pecho y con las piernas entrelazadas. Juanjo abrió los ojos con demasiada rapidez, tanto que tuvo que maldecir en susurros ante lo fuerte que era la luz y lo poco preparado que había estado para abrir los ojos. No obstante, una vez su visión se había acostumbrado a la exagerada iluminación, pudo ver mejor la situación.
La situación no dejaba de ser un chico encima de su pecho con una de sus manos apoyada encima del corazón, el cual empezó a latir con más rapidez al darse cuenta de la posición en la que estaban.
Notaba el roce piel con piel de el brazo y la cara del chico con su pecho desnudo, así como el cosquilleo que le hacía el pelo desordenado del pequeño en las clavículas y el hombro izquierdo. Sin darse cuenta, su mano había empezado a acariciar aquél lugar desnudo que cuando se dio cuenta de lo que estaba haciendo pudo determinar como la cintura del chico, ¿Por qué había empezado a acariciar la cintura de Martin, y más importante aún, por qué su mano se había colado en el interior de su camiseta para hacerlo?
La alzó rápidamente al darse cuenta de ese contacto, sintiendo como esa piel era una zona determinantemente prohibida. Mientras tragaba saliva vio su mano alzada y la acabo colocando en un espacio libre de la cama, lejos, muy lejos de la cintura que definitivamente no debería de haber estado acariciando y mucho menos cogiendo durante a saber cuantas horas de la noche.
Sin embargo, lo más seguro es que aquel movimiento brusco empezó a despertar al menor, y Juanjo preso del pánico decidió hacerse el dormido, deseando que el pequeño no notara lo rápido que le latía el corazón.
Martin empezó a moverse encima del torso contrario, acurrucándose más incluso en la piel del contrario, Juanjo casi suelta una risita por culpa del cosquilleo constante del pelo del pequeño. Al poco tiempo notó como el menor paró en seco, y seguidamente colocó una de sus manos en el abdomen bajo y otra en uno de sus pectorales para alzar su torso y verle directamente.
La sonrisa desapareció inmediatamente al notar la mano del pequeño justo en esa zona, tensando el abdomen nada más las yemas de la mano hicieron contacto con la piel. "mierda, justo ahí no" pensó al recordar el sueño de hacía una noche.
