A Treacherous Game || Fanfic de Duskwood

17: Parte 1

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Mi respiración se volvió inestable y sentí que mi cuerpo estaba sudando. Dan era el que nos había delatado con el FBI. Sentía unas inmensas ganas de llorar que se mezclaban con la rabia que sentía en ese momento.

Nunca me molesté en ocultarlo, me había encariñado demasiado con los chicos. Sobre todo con Jessy, Dan y Lilly. Y ahora resultaba que una de las personas en las que más confiaba, había traicionado a la persona por la que yo daría mi vida. Quería vomitar. Tardé aproximadamente una hora en salir del estado de shock. Cerré el programa que mostraba el celular de Dan y entre todas las carpetas que habían, volví a tomarme con aquella que llevaba mi nombre.

Al carajo. Necesitaba saberlo todo.

La abrí con el corazón palpitandome con fuerza y de inmediato busqué la carpeta que había llamado mi atención antes de que Hannah apareciera. Esa que en el nombre tenía la palabra Contacts muy bien escondida. La abrí y encontré alrededor de veinte carpetas más. Abrí la primera. Todo estaba codificado y no había ningún enlace a nada. Era una especie de programación, ya que la pantalla era completamente oscura y las letras y números eran del mismo tono verde. No me detuve. Abrí cada una de esas carpetas hasta que di con la correcta.

No era diferente a las demás, solo que esta al final de todo tenía un enlace que me redirigió a un programa. Luego ví la pantalla de mi celular. Sentía como los nervios recorrían mi espina dorsal lentamente. Lo desbloqueé y al instante ví mi lista de contactos.

Todo se rompió en mí.

No entendía muy bien como lo había logrado, pero Jake había hecho algo para que cualquier número proveniente de Duskwood no pudiera acceder a mi teléfono. Al igual que mi teléfono no pudiera acceder a ellos. Es decir, había bloqueado no solo a mis amigos. Sino cada señal que se registrara desde Duskwood. Jake había impedido que mis amigos contactaran conmigo. Comencé a llorar. Primero descubrir lo de Dan y ahora esto... De Jake.

Aparté la laptop de mi regazo y abracé mis piernas sintiéndome completamente insegura. Sentía algo en mi pecho que no entendia qué era, pero dolía mucho. Entendía perfectamente que Jake no quería ponerme en más peligro pero... Joder, eso había sido muy duro.

Horas después de que amaneciera, Jake salió de nuestra habitación buscándome con la mirada y, al notar que estaba sentada en el sillón, se acercó a mí.

—¿Otra vez no pudiste dormir? —susurró sonriendo levemente y cuando vió las brillantes lágrimas que corrían por mi mejilla, su expresión cambió a una sumamente preocupada—. Maxine, ¿Qué pasó?

Se hincó frente a mí tratando de tomar mi mano, pero yo me aparté. De inmediato me puse de pie rodeando la mesita que había frente al sillón y me posicioné a aproximadamente dos metros de distribución de Jake.

—Fuiste tú...

—¿De que hablas preciosa? —yo negué con la cabeza y limpié mis lágrimas.

—Tu fuiste quien impidió que me comunicara con las personas de Duskwood. No lo niegues, lo ví todo.

—Max, yo... —lo interrumpí.

—¿Qué carajos pasó por tu cabeza al aislarme así?

—Quería protegerte, enserio —susurró tratando de acercarse a mí—. Max, no quería que mis perseguidores llegarán hasta ti y debía esconderte. Por favor, créeme —me miró con tristeza y arrepentimiento brillando en sus ojos.

Claro que le creía, pero eso no disminuyó mi enojo.

—No lo entiendes —mis ojos se inundaron de lágrimas nuevamente y retrocedí para evitar que me tocara—. No entiendes ni una mierda.