La hija de papi

Capitulo 5

           Un día de mierda

Me separé lentamente de ella para mirarla a la cara, encontrándome con esos ojos miel que tanto me gustan. La acerqué más a mí abrazándola, hundiendo mi cabeza en su cuello, respirando su divino aroma.

— ¿por que me estás evitando?— susurre contra su cuello, sintiendo como su piel se erizaba por mi aliento caliente chocar contra su cuello.
— no... no te estoy evitando— me separé de ella y la mire directamente a los ojos.— por que parece que si lo haces.— coloque mi mano en su mejilla y la acaricie lentamente. Tenía una pregunta en mente que no me la podía sacar.— ¿acaso lo de ayer no significa nada para ti?— pregunté, mirando como se ponía seria.
—claro que sí, significó mucho para mí, por qué como te dije tú también me gustas— me agarró las manos y las acaricias.

— Es solo que tengo un poco de miedo , nunca estuve con alguien antes y me da miedo salir lastimada—. La acerqué a mí y la abrase, sintiendo como ahora ella era la que escondía su cabeza en mi cuello. — yo nunca te lastimaré- bese su cabeza y se la acaricie.— ¿te puedo llevar a casa hoy?—.

Después de esa pregunta pasaron unos minutos, asta que sentí con asentía con la cabeza
— solo debo de avisarle a mi mejor amiga que me iré contigo-
Me quedé un par de minutos analizando sus palabras ¿mejor amiga? — ¿tienes mejor amiga?-
Se separó de mí y me miró como si fuera obvio, suspiro al ver mi cara de confundida y luego hablo.
— siempre está con migo, solo que estás tan concentrada en mí que no la notas. Aunque debo de admitir que me gusta— solté un carcajada mientras la acercaba a mí para robarle algunos besos más

Antes de ir a clases.

:)

La clases avían terminado ase 15 segundos y desde ese tiempo estoy buscando a rai por toda la multitud de estudiantes, no la encuentro por ningún lado y ya me estaba cansando un poco de caminar por los pasillos una y otras vez.
Cuando iba caminado por unos de los salones ( el de música) para ser exactos, escuché unos gritos amortiguados, me frene de golpe al escuchar unos ruidos algo escandalosos. No sé si an escuchado el dicho "la curiosidad mató al gato" bueno la curiosidad me estaba matando a mi, tenía demasiada intriga por lo que estaría pasando allí adentro, así que, me acerqué al salón.

Gran error

Lo que vi me dejó tiesa en mi lugar, pues en ese salón estaba Carlos acorralando a rai en una pared mientras se besaban ferozmente. Mi corazón se estrujó tanto que sentí como se partía, sentí mi respiración acelerarse y como mis ojos empezaban a arder.

Coloque mi mano en mi pecho intentando tranquilizar un poco el dolor insoportable que producía mi pecho al ser golpeado con fuerza por mi propio corazón.

Una chispa, una corriente eléctrica pasó por todo mi cuerpo y rápidamente una rabia se apoderó de mí cuando me di de cuenta que ese beso estaba forzado por Carlos. Desde mi distancia podía ver las lágrimas de rai mientras esta intentaba separarse de él, sin nada más que pensar corrí hacia ellos empujando a Carlos a un lado para luego lanzarme encima de él y empezar a golpearlo en la cara.
Definitivamente la ira me avía nublado la vista, lo golpeaba con tanto deseo, tanto rencor que era casi imposible pensar que éramos buenos amigos.
Lo seguí golpeando aún cuando noté que estaba empezando a sangrar, de hecho eso hizo que sugiera más y más, quería hacerlo pagar por a ver forzado a rai. Él sabía que me gustaba, sabía que nunca les avía contando un tema tan enserio  como lo hice la vez que les hable de rai pero al parecer le valió mierda así como a mí me vale mierda si le rompo la cara. 

—¡eres un idiota!— le grité mientras él recibía golpe tras golpe de mi parte, en un momento de desespero de su parte, me empujó hacia atrás, se acercó a mí quedando el encima de mí golpeándome la cara con todas sus fuerzas. Busqué con mis manos lo primero que encontrara y para mi fortuna encontré un micrófono y se lo estampe en la cara. Tirándolo a un lado mientras me paraba con dificultad.

Busqué desesperadamente a rai con la mirada, encontrándola llorando no tan lejos de donde estaba yo, me acerqué a ella y la tomé de la mano para salir de ese lugar de mierda, pero una voz o más bien un comentario me hizo frenar de golpe.

— Acaso piensas que alguien como ella estará con alguien como tú he? Dime algo Alondra, que te hace pensar que no lo estábamos pasando bien antes de que llegaras. Tu solo eres una estúpida que te has pintado todo un mundo de rosa que no existe.

Aunque no lo quisiera admitir, sus palabras me estaban lastimando brutalmente.

—¡ CÁLLATE!— grité desesperadamente, intentando convencerme a mí misma de que sus palabras eran mentira.
— Siempre quieres ser el centro de atención, pero adivina que, no lo eres.En cuanto se aburra de ti, se buscará a alguien más o mucho mejor vendrá detrás de mí.

Apreté fuertemente mis dientes y con un paso filme me dirigí con rai a mi auto.

Nos subimos en este y conduje rumbo a la casa de rai. El camino fue silencioso, podía sentir la mirada de rai en mi, pero mi mente estaba en cada una de las palabras que avía dicho Carlos.
Una mano en mi cara hizo que saliera de mis pensamientos, era rai quien acariciaba mi mejilla lastimada, para luego delinear todo mi rostro hasta llegar a mi labio. Aunque me encantaba su contacto me sentía demasiado enfadada ¿con quién? ¿Por qué? No lo sé, solo sé que ver a rai besarse con Carlos me avía lastimado mucho, tanto que aún siento el dolor ardiente en mi pecho.

Corrí mi cara para un lado, evitando su tacto. Aviamos llegado a su casa por lo que paré el carro, esperando a que saliera.
— Alondra... yo...—.intento tocarme el rostro una vez más pero nuevamente evite su acto.
— mañana hablamos— fue lo único que dije para luego desviar mi mirada a ventana que tenía al lado, ocultando las pequeñas lágrimas que empezaban a derramarse.
Sentí como bajaba del carro por lo que en cuanto salió de este lo encendí y maneje a al primer bar que estuviera abierto.

Cuando llegué lo primero que hice fue dirigirme a la barra y pedir el trago más fuerte que tuvieran , para así tal vez controlar este ardor inmenso que sentía o que simplemente me dejara inconsciente para olvidar lo que acababa de pasar por un rato.

Un largo rato antes de caer en la realidad.

:(

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Creo que la curiosidad esta vez mató a Alondra

M💕