Guerras Del Norte

Capítulo #18

Agradecimiento especial a PICHMICH_21 por tan bellas ilustraciónes ☺️...

Luego del difícil pero exitoso robo de aquella joya, Einar y sus camaradas regresan finalmente al castillo de Jarl Ferguson, son vislumbrados por sus correspondientes bestias pero el silencio reina en el lugar y apenas logran ver a algunos vikingos rondando en las afueras del castillo, el robusto de cabello negro azabache no lo piensa más y camina de manera apresurada mientras los demas lo siguen.

- Hay mucho silencio en el castillo, debemos entrar y buscar a Ferguson y no me importa si está dormido o muerto - ordena Einar abriendo la enorme puerta con solo una fuerte patada.

Aquella patada solo abre una de las puertas, así que rápidamente pasan al interior del castillo, el ambiente del recibidor donde estuvieron horas atrás es lúgubre y oscuro a pesar de las antorchas, caminan varios pasos hasta llegar al mismo pasillo que lleva a los dos que se dirigen a las alcobas, Einar no duda más y comienza a llamar a Ferguson a todo pulmón.
Después de varios gritos de su gruesa voz Ferguson sale de su habitación y el azabache de ojos azules esperaba ver a Nilsa salir al escuchar su voz, pero algo en el despierta, su corazón se acelera ante todos los escenarios que pasan por su mente en torno a la princesa.

- Vaya, Jarl Hrørvarld, llegaron antes de lo que esperaba, supongo que tuvieron éxito ¿No es así? - Ferguson se asoma al barandal frente a su alcoba para verlos.

- Tenemos el ojo de Odín, como lo pediste, ahora quiero mi recompensa y a mí mujer - le exige Einar mostrándole la joya para guardarla en u a bolsa de tela y colgarla de su cinturón.

- Bien, tu mujer no ha podido dormir, anda... Merodeando por mi castillo, pero podemos buscarla, vengan los guiare - el anciano se dirige al pasillo que lleva más al interior del castillo.

- ¿Crees que le hizo algo a Nilsa, Jarl? - le Leifr mientras suben las escaleras hacia Ferguson.

- Si se atrevió a ponerle una mano encima a Nilsa, lo mataré - responde Einar del mismo modo.

Una vez frente a Ferguson, se adentran en aquel pasillo por dónde Nilsa se a escabullido junto a su bestia, mientras que ella ha llegado a unas escuelas bastante empinadas y sin barandales que muestras una gran altura y ruinas antiguas apenas iluminadas por fuego azul de una gran antorcha en las que también se pueden ver algunos árboles gigantes y antiguos enterrados en los muros, la peli plata baja aquellas escaleras montando sobre el lince que calcula cada paso que da.

- Nunca he visto unas ruinas tan grandes y menos bajó un castillo, Rügniir... ¿Que ocultas Jarl Ferguson? - se cuestiona Nilsa mirando el paisaje oscuro y lúgubre bajo las escaleras.

La incertidumbre en ella crece a cada paso que su bestia, al mismo tiempo que Jarl Ferguson y Jarl Einar se dirigen al mismo lugar, no muy lejos de alcanzarla.

Minutos después, Nilsa y Rügniir llegan finalmente al final de aquellas escaleras, sus ojos esmeralda se acostumbran con dificultad a la poca luz del lugar, pero escucha los pasos de dos guardias y no logra verlos hasta que los tiene cerca, los guardias la detienen en intentan interrogar la ella no da a conoce su voz.

Saca rápidamente la espada de su padre de su funda se enfrenta a uno de ellos, la agilidad y gracia que la caracteriza en sus ataques sus armas chocan incesantes hasta que Nilsa logra acertar un corte la muñeca de su oponente se sostiene la espada y una vez que este la suelta dirige su espada al corazón del vikingo, las saca y con su rápido movimiento hacia arriba arranca el rostro de su víctima que ahora yace en el suelo, mientras que Rügniir mató al otro rápidamente con solo sus poderosas garras y colmillos.