Sigma, Fyodor y Nikolai se encontraban caminando hacia el laboratorio para la clase de Química, pues era la materia que les correspondía a primera hora ese día.
Estaban emocionados debido a que ese día iban a poder hacer sus propios experimentos, pues tendrían un tipo de "competencia" en su salón, la cual consistía en que el que hiciera el mejor experimento tendría tres puntos extras. Como era de esperarse, todos estaban dispuestos a dar todo en el experimento.
Llegaron al lugar y ocuparon su lugar correspondiente, aunque antes debieron colocarse la protección necesaria para iniciar una vez con los experimentos.
—Tienen varios elementos y compuestos a su disposición —habló el maestro —. Sólo... no exploten el laboratorio, por favor, que el año pasado hubo un chico que sí lo hizo —soltó un suspiro.
—Ah, sí me acuerdo de eso —susurró Fyodor —. Aún recuerdo que el grupo de Dazai fue el que explotó el lugar.
—¿En serio? —los otros dos se acercaron a su amigo.
—¿Y quién lo explotó? —preguntó Nikolai.
—Dazai, obviamente.
—Tengo la confianza de que no harán nada irresponsable, por lo que saldré un momento —anunció —. El que explote algo se las verá conmigo, sólo yo puedo explotar este lugar —dijo eso para después salir del lugar, dejando a los alumnos sin supervisión.
—El profesor Kaji es extraño —comentó Sigma.
—Sí...
—Bueno... ¡A empezar con los experimentos!
Nikolai dió un salto y comenzó a pasear por el laboratorio, tratando de buscar algo que le llamara la atención para mezclar, aunque nada lo convencía. Miraba cómo sus compañeros hacían experimentos básicos, por ejemplo, el típico de mezclar agua con aceite y colorantes.
No sabía porqué, pero comenzó a sentir algo de envidia por los demás, quienes ya tenían planeado un experimento desde hace tiempo; y él, por el contrario, no tenía nada. Hasta llegó a pensar tomar lo primero que viera para juntarlo.
Y esa fue la opción que tomó al final.
Al principio, tomó un poco de agua: algo básico, pero que posiblemente le sería útil. Después, dió otra vuelta por el lugar, tratando de ignorar los experimentos de sus compañeros. Al final, tomó el sodio metálico que había en un recipiente, ignorando por completo el letrero que decía "No mezclar con agua".
Con todo preparado, regresó a su estación, dejando los elementos en la mesa.
—¿En serio vas a combinar eso? —Fyodor se acercó a él —. Dime que no, por favor.
—Pues sí, dah —el albino soltó una leve risa —. ¿Por qué no quieres que lo haga? —inclinó su cabeza.
—Porque se supone que eso no se debería mezclar.
—Ay, Fyo, no va a pasar nada —colocó el agua en un recipiente —. ¿Acaso tienes miedo de que esto explote? —se acercó al rostro del contrario, estando a centímetros de sus labios.
—Nikolai... —un pequeño sonrojo apareció en sus mejillas.
—¿Estás nervioso, acaso? —se acercó un poco más.
El violáceo vió como el de trenza tiraba gran cantidad del sodio al agua por accidente, pues no fue consciente de que lo había movido gracias a su acercamiento al contrario. Fyodor sabía lo que pasaba cuando se mezclaban grandes cantidades, por lo que se alejó un poco.
—¡Cuidado, Nikolai! —lo tomó por los hombros y lo acercó hacia él, alejándolo de la reacción, aunque terminaron cayendo al suelo.
El albino no entendió porqué había hecho eso hasta que el ruido de una explosión sonó en el lugar, provocando que todos soltaran un grito y que se cubrieran de dicha explosión. Nikolai se tapó los oídos mientras se pegaba a Fyodor, quien parecía haberlo estado abrazando para "protegerlo".
—¡¿Qué pasó aquí?!
La voz del director apareció en el lugar, y por el tono de voz que tuvo, era obvio que Nikolai se iba a meter en problemas, al igual que el maestro por haberlos dejado solos.
♢♧🂱♧♢
Nikolai estaba sentado frente al escritorio del director, con el maestro al lado suyo y Fyodor como testigo. El mayor miraba seriamente al albino, quien tenía una sonrisa inocente y nerviosa a la vez.
—Está en problemas, caballero —habló el director —. Y usted también, profesor —volteó hacia el otro hombre —. Dejar a los alumnos sin supervisión causó todo esto, debió de haber estado en el laboratorio con los alumnos.
—Sólo fuí por una limonada.
—Pues tardó bastante... —murmuró el de trenza hacia el azabache.
—Dejen los murmullos —Fukuzawa, el director, dió un golpe a la mesa —. Verá, Nikolai, la explosión en el laboratorio pudo haber sido algo grave, por lo que debe ser consiente del daño y...
—Sí, ya lo sé —intervino —. Pero, como ya dije, fué un accidente —se recargó en el respaldo de la silla en la que se encontraba.
—Accidente o no, tenemos que llamar a sus padres para notificarles el daño producido —informó.
Los ojos del albino se abrieron con demasiada sorpresa. ¿Llamar a sus padres? Eso sería mil veces terrible para él.
—E-este... No creo que sea necesario llamarlos —se movió en su lugar, algo nervioso —. T-tal vez estén ocupados o...
Se sobresaltó al oír cómo el director tomaba el teléfono de su oficina y marcaba al número registrado de los padres del albino. Pasaron unos segundos hasta que el mayor volvió a colgar el teléfono, sin haber sido respondido.
—Si no responden, tendré que mandar el documento para que vengan —dijo mientras buscaba algo en su cajón para después sacar un papel —. Ponle tus datos y lo traes firmado mañana —le entregó el papel.
—¿Qué es esto? —tomó la hoja entre sus manos, leyendo el contenido.
—Un citatorio —habló Fyodor, sin poder creer lo que veía —. Es para que tus padres vengan a hablar con el director.
—¡¿Qué?! —Nikolai se levantó de su silla —. Pero... Pero...
—No se puede hacer nada más. Necesito que sus padres vengan mañana.
El albino no tuvo más remedio que acceder, aún sabiendo el lío en el que se había metido.
No creía salir vivo de esa situación.
┗◇☆ ᑕOᑎTIᑎᑌᗩᖇᗩ́ ☆◇┛
No intenten mezclar el sodio con el agua, nada más aviso, al menos no en grandes cantidades. Aún así, no lo intenten en casa.
Bueno, ese es el capítulo de hoy, y tienen suerte de que tuvieron capítulo hoy, eh, pensaba en tomarme el día libre por el primero de noviembre (día de muertos, aquí en mi país), pero al final sí tuvieron capítulo.
Próximo capítulo: 3 de noviembre.
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Como las mariposas.
FanfictionLas mariposas son seres que vuelan en libertad, al menos que estén en una jaula. Nikolai Gogol es un claro ejemplo de eso, vive una vida sin libertad, por lo que su más grande deseo es ser libre... como las mariposas. ------------------------- Nikol...