IV

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 ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎Enid caminaba a pasos lentos a su habitación, su mirada estaba clavada en suelo, no podía creer que Wednesday la estaba invitando a una cita, después de tanto tiempo, si bien el día anterior la chica se lo había propuesto, la esperanza...

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Enid caminaba a pasos lentos a su habitación, su mirada estaba clavada en suelo, no podía creer que Wednesday la estaba invitando a una cita, después de tanto tiempo, si bien el día anterior la chica se lo había propuesto, la esperanza de que sería un momento entre ellas, no solo Enid y la billetera de Wednesday, la hacía feliz. Sacudió su cabeza obligándose a disipar todos los pensamientos negativos que se instalaban en su cabeza, colocó sus manos detrás de su espalda comenzando a dar saltitos, animandose a sí misma para disfrutar de prepararse para la cita, debía ser positiva.

El día parecía estar a su favor, el clima estaba cálido, el sol estaba en su máximo punto, dejando los ojos de Enid deslumbrados por tanta luz, los árboles se agitaban en armonía con la leve frescura, era como estar dentro de una pintoresca obra de arte sobre un bosque encantado, o algo así suponía Enid.

— Mmh... Debí haber traído a Yoko.

Dijo mientras que en sus manos sostenía dos atuendos completamente diferentes pero igual de bellos, los ponía uno a uno frente a su cuerpo, se observaba en el espejo de su lado de la habitación y con mucha indecisión, terminó eligiendo una falda rosa tabloneada a cuatro dedos sobre la rodilla, una blusa de un rosa más oscuro y un suéter blanco con botones del mismo color de la falda,  todo estaba perfectamente combinado. Cuando salió de bañarse, observó el antiguo reloj colgado en la pared y con rapidez comenzó a vestirse, eran las 5 PM y la cita era a las 7 PM, faltaban dos horas, pero para Enid, la chica que disfruta resaltar hasta el últimos detalles para impresionar a su novia, no era suficiente, más ahora que después de tantos meses iban a reunirse fuera de la escuela.

— ¿Qué opinas, Dedos?... — Preguntó refiriéndose al autendo — ¿Habré sido muy dura con ella en la mañana? Quiero decir... Me sentía triste, pero ella volvió a tener iniciativa.

El tono de voz de Enid era apagado, estaba arrepentida por su natural actitud de decepción hacia Wednesday, miraba a Dedos quien animadamente le daba a entender que su ropa estaba perfecta, que Wednesday era suertuda de tener a una chica tan bonita como ella, esto le sacó una amplia sonrisa.

— Eres muy hábil con las chicas, Dedos.

Dijo Enid en señal de cumplido y Dedos simplemente hizo un gesto con sus cortadas articulaciones dando un sincero gracias. Encendió su laptop para poner a sonar sus músicas favoritas, disfrutaba de las melodías que tanto le gustaban, subía el volumen cada que debía pasar una parte que se sabía de memoria, mientras todo esto pasaba, sus manos se encargaban de darle más belleza a su rostro con el maquillaje, las sombras en sus párpados eran de colores pasteles, su labial y gloss hacían ver sus labios como deliciosas fresas que gritaban por ser probadas.

Se colocó una diadema color blanca sobre su peinado cabello, roció una agradable loción que Wednesday tiempo atrás le había regalado, dió últimos retoques observándose en el espejo, sintiéndose complacida por su atuendo y maquillaje, no faltaron sus accesorios en sus manos, constaban de pulseras con las iníciales de su chica.

" 𝖸𝗈𝗎 𝗱𝗶𝗱𝗻'𝘁 𝗄𝗇𝗈𝗐 " | WenclairDonde viven las historias. Descúbrelo ahora