恢复 | « En dónde Enid pierde poco a poco las esperanzas en su relación con Wednesday. O donde Wednesday a pesar de su personalidad, intenta recuperar a su rubia. »
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Wednesday Addams
Lo debo admitir, el camino a la habitación estuvo solitario, tal vez por la hora, tal vez por el dolor en mi corazón. Normalmente mantengo la calma ante eventos, como combatir con monstruos, casi ser asesinada, presenciar rituales, ver vísceras y sangre por doquier, pero nada me había hecho descolocarme tanto de mi estado de calma como lo ocurrido hace unas horas.
Y aquí estoy, sola, acostada sobre mi cama con la mirada al techo, mis brazos cruzados cual cadáver, un suspiro brotó de mis labios intentando liberar la creciente tensión en mi pecho.
— Buenas noches, Enid.
Qué tonta, hacía mucho tiempo que no le daba ni las buenas noches y lo hago ahora que ella no está aquí, cerré mis ojos intentando conciliar el sueño y tomar fuerzas incluso de mis ancestros para que me ayudaran a tener una oportunidad de hablar con Enid.
La calma vino a mí solo unos minutos, mis ojos ya estaban pesados por el cansancio del día atareado y cuando creí que me quedaría dormida.
Escuché la risa de Enid.
Abrí los ojos y me levanté con rapidez de la cama, mirando a todos lados.
Buscándola.
Esperaba volverme loca luego de presenciar una buena tortura, no por un drama adolescente.
No es cualquier drama adolescente, es TU drama adolescente.
Me dijo mi propio subconsciente, fruncí el ceño, mi vista se quedó admirando un suéter de Enid que reposaba sobre su cama, mi sueño y cansancio se fueron a la basura, me estaba obligando a contener mis sentimientos debido a la ruptura pues, esperaba que de alguna forma todo esto se resolvería en algún momento clave con Enid.
Si bien dije que no iba a tener sentimientos fuertes de tristeza, terminé quedándome en la cama de Enid, solo porque el aroma de su perfume estaba allí, aunque había algo extraño, no olía de la misma forma que siempre, ¿Había cambiado su perfume?, ¿Y desde cuándo su cama había adoptado colores diferentes al rosa?. Los primeros rayos de sol se colaron por la ventana, fruncí el ceño al darme cuenta de que mi distracción con Enid iba en aumento.
Con pocas ganas me alisté con el uniforme adecuado, mientras iba a cambiarme, mi vista se regresó al lado de la habitación de Enid, mi rostro se suavizó pensando en qué si ella estuviera aquí, me habría dicho un “Buenos días” y una dulce sonrisa que me haría aliviar todos mis pesares, ¿Por qué no me había dado cuenta antes de que la presencia de Enid me haría tanta falta si un día se iba?. Al finalizar los arreglos en mi mochila, me la puse en el hombro y salí de la habitación rumbo a la primera clase, afortunadamente la compartiría con Enid, tendría una oportunidad de hablar con ella, al entrar en ese salón repleto de alumnos carentes de inteligencia mínima, el perfume conocido de Enid se coló por mis fosas nasales, mi mirada se fue directo al espacio libre junto a la chica.
