DARK MOON: La Sangre de Vargr - ENHYPEN [Trad. Español]

49. El ataque final (2)

Antes de que pudiera defenderse, una daga voló hacia Noa. Y Noa, esquivando la daga que pasaba frente a él, giró su mirada.

Pudo ver a través de la oscuridad, y pudo divisar unos ojos rojos. Una mujer con cabello tan rojo como aquellos ojos.

Noa la reconoció en un instante.

"Tú..."

La primera vez que vio a esa mujer fue en el palacio de la princesa. La siguiente fue durante la rebelión de Keelan.

Después de eso, vio a una mujer que lucía exactamente como ella, pero con un color de pelo diferente, saliendo de la oficina de Dardan.

Fue el momento en que los pequeños acertijos que no cuadraban con la situación cobraron sentido en la cabeza de Noa.

"Ahora lo entiendo"

Noa murmuró brevemente.

"Es una espía"

Siempre estuvo en lo correcto.

Noa y Trisha mostraron su intención de matarse el uno al otro.

De un momento a otro, Trisha jadeó sorprendida. Había una delgada línea roja ahora alrededor de su cuello, casi asfixiándola. En un instante, cuando Noa la atacó, apuntando a su cuello, Trisha sacó su daga y se escondió en la sombra del árbol.

Pero Noa también era un chico que sabía manejarse entre las sombras. No permitiría que Trisha se escondiera. Cerró la brecha de nuevo y golpeó la daga de Trisha.

Tomando la muñeca derecha de Trisha, que sostenía la daga, Noa le torció brazo alrededor del cuerpo. Trisha frunció el ceño, pero no se quejó a pesar del dolor en sus brazos.

Hasta que sintió que sus dedos no funcionaban.

Sus tendones se habían desgarrado.

Trisha pateó a Noa en la rodilla con su talón. Noa cambió su postura y esquivó el ataque de Trisha por un pelo, pero no pudo evitar que Trisha le aplastara el pie empleando toda su fuerza vampírica.

"Aghhhh"

Noa retrocedió, reprimiendo un grito. Parecía que se habían roto dos de sus dedos del pie. Probablemente aquello afectaría gravemente su habilidad durante la batalla.

Dada aquella posibilidad, por un momento consideró si sería mejor sacrificarse y cortarse ambos dedos del pie.

Noa amaba a Ashana. Amaba el pobre y pequeño vecindario en el que había crecido. Y rezaba por la paz de Ashana, donde se encontraba aquel vecindario. Pero aquella tierra ya no era segura, así que tendría que luchar.

'Todos ellos deben morir'

Noa pateó el suelo con los dedos de los pies ensangrentados.

En particular, debía averiguar el camino más corto que Heli pudiera tomar para llegar a Dardan y acabar con él.