Carreras de motos

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Ross estaba decidido a encontrar a Nova y descubrir qué estaba tramando. Después de investigar, descubrió que Nova estaba involucrada en carreras de motos clandestinas en la ciudad.

Ross se dirigió al lugar de la carrera, un abandonado almacén en la zona industrial de la ciudad. Cuando llegó, vio a Nova, vestida con un traje de cuero y casco, preparándose para correr.

—Nova, ¿qué estás haciendo? —preguntó Ross.

Nova se volvió hacia él, sonriendo.

—Estoy demostrando mi habilidad —dijo—. Y ganando dinero para mi próximo movimiento.

Ross se sintió intrigado.

—¿Qué movimiento? —preguntó.

Nova se rió.

—Todavía no —dijo—. Pero pronto lo sabrás.

La carrera comenzó, y Nova se lanzó al frente, su moto rugiendo como un animal salvaje. Ross la siguió, decidido a protegerla y descubrir sus planes.

La carrera fue intensa, con Nova y otros corredores disputando el primer lugar. Pero Nova era una conductora experta, y pronto se encontró en la cabeza de la carrera.

De repente, un corredor se estrelló contra la barrera, y Nova se vio obligada a hacer un giro brusco para evitarlo. Ross se acercó a ella, preocupado.

—¿Estás bien? —preguntó.

Nova asintió.

—Sí —dijo—.

Ross se sintió intrigado.

Ross y Nova se encontraban en un circuito de carreras de alta velocidad, listos para enfrentarse en una carrera que decidiría quién era el mejor conductor.

—Estoy listo para vencerte —dijo Ross, sonriendo.

Nova se rió.

—No creo que puedas —dijo.

Justo cuando la carrera estaba a punto de comenzar, una mujer hermosa y elegante se acercó a Ross.

—Hola, Ross —dijo, besándolo en la mejilla.

Ross se sintió incómodo.

—Hola, Sofía —dijo.

Nova se sintió intrigada.

—¿Quién es? —preguntó.

Ross se encogió de hombros.

—Mi ex —dijo.

Sofía se volvió hacia Nova, con una mirada celosa.

—¿Y tú quién eres? —preguntó.

Nova sonrió.

—Soy Nova —dijo—. La que va a vencer a Ross en esta carrera.

Sofía se rió.

—No creo que puedas —dijo—. Ross es el mejor conductor del mundo.

Nova se encogió de hombros.

—Veremos y Ross con cuidado te intoxicas —dijo.

— intoxicarme con que?- dijo Ross mirando fijamente a nova

— con el humo de mi moto - dijo nova bajando el visor de su casco

La carrera comenzó, y Ross y Nova se lanzaron al frente, con Sofía observando desde la línea de meta.

A medida que la carrera avanzaba, Ross y Nova se encontraban empatados, pero la conexión entre ellos era evidente.

Sofía se sintió cada vez más celosa.

—¿Qué pasa entre tú y Nova? —preguntó a Ross durante una parada.

Ross se encogió de hombros.

—Nada —dijo—. Solo una rivalidad en la pista.

Sofía no se creyó.

—No te creo —dijo—. Hay algo entre tú y ella.

Ross se sintió incómodo.

—Sofía, por favor —dijo—. No es el momento.

La carrera seguía estaban tan empatados que las motos parecían andar sin piloto. Ross tenía la delantera pero en una curva nova lo cerró dejándolo en la parte de atrás haciendo que ella tomara la delantera y dejara a Ross viendo solo el humo de su moto.

La carrera terminó, y Nova cruzó la línea de meta en primer lugar, seguida de cerca por Ross.

Nova se bajó de su moto, sonriendo de oreja a oreja.

—Gané —dijo, triunfante.

Jack uno de los organizadores de las carreras se acercó a ella, felicitándola.

—Eres una conductora increíble —dijo.

Sofía se acercó y ross se acercaron a ellos. Sofía con un rostro de envidia.

—No puedes haber ganado —dijo, su voz temblando.

Nova se volvió hacia ella.

—Lo siento, Sofía —dijo—. Pero soy la mejor.

Sofía se enfureció aún más.

—No eres nada —dijo, levantando la mano para golpear a Nova.

Ross intervino, agarrando la muñeca de Sofía.

—No, Sofía —dijo—. No hagas eso.

Sofía se volvió hacia él, su mirada llena de odio.

—Tú siempre defendes a los demás —dijo—. Pero nunca me defendiste a mí.

Nova se sintió incómoda.

—Sofía, lo siento —dijo—. No quería causarte dolor.

Sofía se rió.

—No me causaste dolor —dijo—. Me hiciste ver que Ross nunca fue mío.

Ross se sintió incómodo.

—Sofía, por favor —dijo—. No digas eso.

Sofía se alejó, llorando.

Nova se volvió hacia Ross.

—Lo siento —dijo—. No quería causar problemas.

Ross se encogió de hombros.

—No es tu culpa —dijo—. Sofía siempre fue celosa.

Nova sonrió.

—Gracias por defenderme pero no lo necesitaba. —dijo.

Ross sonrió también.

—no hay de qué, a la próxima dejo que re acaben —dijo.

— que tu noviecita me va acabar a mí ? Por favor tú no puedes ni conmigo- dijo eso alejándose y subiéndose a su moto.

Peleas infernales Donde viven las historias. Descúbrelo ahora