La noche del combate había llegado. El almacén estaba lleno de gente, todos ansiosos por ver la lucha entre Ross y Nova. El aire estaba cargado de tensión y expectación.
Ross se ajustó los guantes mientras se dirigía al ring. Vic, su entrenador, le dio un golpe en la espalda.
—Recuerda, Ross, no subestimes a Nova —dijo Vic—. Es una luchadora peligrosa.
Ross asintió.
—No la subestimaré —dijo.
Nova ya estaba en el ring, su mirada fija en Ross. Era una mujer impresionante, con un cuerpo atlético y una determinación en los ojos que hacía que Ross se sintiera incómodo.
La campana sonó y el combate comenzó. Ross y Nova se enfrentaron en el centro del ring, ambos buscando el primer golpe.
Nova fue la primera en atacar, un puñetazo rápido y preciso que Ross bloqueó con dificultad. Ross contraatacó con un golpe poderoso, pero Nova esquivó con facilidad.
El combate era intenso, ambos luchadores dando todo de sí. Ross estaba impresionado por la habilidad de Nova, pero no estaba dispuesto a perder.
De repente, Nova lanzó un golpe que Ross no pudo bloquear. Cayó al suelo, dolorido y aturdido.
Nova se acercó a él, su mirada triunfante.
—¿Rindes? —preguntó.
Ross se levantó, su mirada enfurecida.
—Nunca —dijo.
El combate continuó, ambos luchadores dando todo de sí. Pero Nova parecía tener la ventaja.
Ross comenzó a sentirse cansado, su respiración agitada. Nova, por otro lado, parecía fresca y lista para continuar.
De repente, Ross recordó las palabras de Vic: "Nova tiene un punto débil. Busca el punto débil y explótalo".
Ross miró a Nova, buscando ese punto débil. Y entonces lo vio: una pequeña herida en su costado.
Ross sonrió, sabiendo que había encontrado la clave para ganar.
El combate continuó, Ross atacando con renovada energía. Nova se defendió con dificultad, pero Ross estaba decidido a ganar.
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Peleas infernales
RandomEn un mundo de sombras y violencias dos rivales se enfrentan en el ring. El demonio y la muerte blanca, qué pasaría si en campeón invicto es derrotado por una mujer.
