Exclusive (TRADUCIDA)

6: Say yes to heaven

T/N'S POV

— No puedo creer que este viaje ya se haya terminado. Siento que este es un lugar en el que podría pasar mucho tiempo. Aunque tengo que admitir que creo que prefiero Oxford — Digo mientras camino de la mano con Florence por el aeropuerto hacia nuestra puerta de embarque. Ella aprieta mi mano y me sonríe

— Qué bueno que volveremos en unos meses entonces, porque lo digo en serio. Quiero que vuelvas conmigo en Navidad — Dice. Puedo notar un toque de nerviosismo en su voz.

Es mi turno de sonreír — Y yo también lo decía en serio cuando dije que sí. Me encantaría experimentar la Navidad en el Reino Unido. Ver tu hogar en toda su tranquila belleza. Pero sobre todo, quiero pasar las fiestas contigo — Admito sinceramente.

Realmente no me importa en qué parte del mundo termine en Navidad, siempre y cuando despierte a su lado. Florence me mira con asombro, como si no pudiera creer que acabara de admitir eso.

— No hay nada que desee más que eso, cariño.

Finalmente llegamos a nuestra puerta unos minutos antes de la hora de embarque. Encontramos dos asientos libres y nos sentamos a esperar.

— Entonces dime, en la mañana de Navidad, ¿eres de los que se levantan temprano o prefieres dormir hasta tarde? — Pregunta.

Lo pienso por un segundo, recordando todas mis Navidades pasadas — ¿Algo intermedio? Cuando éramos pequeños, Fletcher siempre se despertaba primero y empezaba a lanzarme sus calcetines enrollados hasta que me despertaba — Me río al recordarlo — Aunque sabía que probablemente solo tendría uno o dos regalos pequeños bajo nuestro arbolito de Navidad, siempre estaba emocionado por levantarse y abrirlos — Florence ríe.

— Eso suena definitivamente como él. Apuesto a que era un caso como niño. No puedo darte suficiente respeto por haberlo criado tan bien.

— Definitivamente fue un problema gran parte de nuestras vidas. Pero era solo un niño. Un niño que merecía mucho más que una hermana que intentaba ser todo.

— Oh, pero cariño, tú eras todo. Especialmente para él. Aún lo eres. Te admira.

Sonrío, pero no me llega a los ojos — Lo sé. Y finalmente estoy en un lugar donde puedo reconocer que hice lo mejor que pude. Siempre quise más para él. Aún lo quiero — Digo. Florence aprieta mi mano.

— Está bien, T/n. Siempre has cuidado y seguirás cuidando de ese dulce hombre más y mejor que nadie. Creo que él está bastante contento con su vida en estos días.

Ella tiene razón. Sé que tiene razón. Mi hermano siempre ha tenido esta habilidad innata para simplemente ser feliz. No importa la situación, siempre estaba feliz de tener aire en los pulmones un día más. Entre los dos, él siempre ha sido el optimista. Pero nunca me quejaré de eso. Siempre llevaré cualquier carga pesada si eso significa que él puede sonreír ligero.

Sintiéndome atrapada en mis pensamientos, Florence vuelve a hablar, llevándonos de regreso a la conversación original

— Así que, en la mañana de Navidad, ¿te despierto yo o me despiertas tú?

— Creo que las dos somos bastante madrugadoras, así que cualquiera puede ser. Pero te diré esto desde ahora. Si yo me despierto primero, no te despertaré. Prefiero estar a tu lado, cómoda y cálida, que levantarme y abrir regalos que no pedí — Digo suavemente, a pesar de cuánto lo siento. Florence sonríe.

— Me gusta cómo suena eso. Pero recuerdo que pediste un regalo en particular. Algo que tenías muchas ganas de desenvolver... — Dice con una sonrisa pícara.