Un Trío Peculiar Mahito x itadori X Toge

la aceptación sincera

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Capítulo: La Aceptación Silenciosa

Toge se quedó en silencio después de declararse, su corazón latiendo con fuerza mientras esperaba una respuesta. El ambiente se volvió denso con la tensión, como si todo a su alrededor hubiera dejado de existir, solo quedando él e Itadori, atrapados en el momento. Toge no sabía qué esperar, pero su corazón anhelaba escuchar algo, algo que lo hiciera sentir que todo lo que había arriesgado valía la pena.

Itadori lo miró en silencio, sus ojos transmitiendo una mezcla de sorpresa, duda y algo más que Toge no lograba identificar. Su amigo parecía procesar sus palabras, evaluando lo que acababa de escuchar, y aunque no dijo nada de inmediato, Toge pudo sentir que la incertidumbre era más sobre el propio Itadori que sobre la respuesta que estaba buscando.

Finalmente, después de lo que pareció una eternidad, Itadori respiró hondo y dio un paso más cerca de Toge. Su rostro estaba serio, pero al mismo tiempo había una suavidad en sus ojos, una que Toge nunca había visto antes.

—Toge... —comenzó Itadori, con un tono calmado pero sincero—. No sé cómo decir esto... Pero... me haces sentir algo que no había sentido antes.

Toge sintió como su pecho se apretaba al escuchar esas palabras. Estaba tan nervioso que su respiración se volvió un poco más irregular, pero no apartó la mirada de Itadori. Sabía que esta era la respuesta que había estado esperando, aunque no de la forma que había imaginado.

Itadori continuó:

—No puedo decir que no me guste lo que siento por ti. De hecho... me haces sentir bien. No solo como amigo, sino... de una forma especial. —Sus palabras fueron sinceras, aunque no exentas de duda. Itadori era una persona que siempre trataba de entender sus sentimientos, y esta situación no era diferente—. Así que sí... Te acepto, Toge. Te acepto tal como eres y lo que eso significa.

Un silencio cómodo se instaló entre ellos después de esas palabras. Toge sintió que el peso en su pecho desaparecía, reemplazado por una sensación cálida y ligera. Había esperado algo complicado, pero lo que escuchaba ahora era algo genuino y sencillo, como si todo se estuviera alineando en su lugar.

Toge no pudo evitar sonreír, un gesto que se formó naturalmente en su rostro, aunque algo tímido. En su mente, las dudas se disiparon. Itadori le había dado lo que necesitaba para seguir adelante, y ahora sentía que su corazón estaba en paz.

—Gracias, Itadori... —susurró, su voz temblorosa pero llena de emoción—. No sabes cuánto significa para mí escuchar eso.

Itadori le sonrió de vuelta, sin complicaciones, sin reservas. Era el tipo de sonrisa que solo se da a alguien cercano, alguien en quien confías plenamente. Era el tipo de sonrisa que decía, "Todo estará bien".

Sin decir más, Toge se acercó un poco más, sintiendo que todo lo que había esperado estaba sucediendo de una manera sencilla y honesta. Itadori aceptó lo que le ofrecía, y eso era suficiente para él.

Finalmente, Itadori lo miró y, sin pensarlo mucho, se acercó para darle un leve toque en el hombro.

—Te aprecio, Toge... Siempre estaré aquí para ti, como siempre. —Y esa pequeña frase, acompañada de la cercanía y el toque, fue todo lo que Toge necesitaba para sentir que había dado el primer paso correcto.

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