𝗛𝗶𝗱𝗱𝗲𝗻 𝗽𝗮𝘀𝘀𝗶𝗼𝗻 ะ 𖤐 ᩼；|KookV

Capítulo 7.

𝘛ú 𝘮𝘦 𝘦𝘯𝘤𝘢𝘯𝘵𝘢𝘴 𝘮á𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘭 𝘤𝘩𝘰𝘤𝘰𝘭𝘢𝘵𝘦.
𝘌𝘴𝘵á𝘴 𝘱𝘢𝘴á', 𝘵𝘰𝘥𝘰 𝘦𝘴 𝘵𝘢𝘯 𝘯𝘰𝘳𝘮𝘢𝘭.

.𖤐 ᩼⁺

— Lo sabía, este vestido es perfecto para ti. — Su Nana se cubrió la boca aguantando las lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos. Su niño al que vio crecer estaba frente a ella con un precioso vestido blanco. — ¿Usted que cree? — La mujer sonrió en grande y camino hasta el doncel.

— ¿No crees que es demasiado? Digo, es bonito pero ¿no piensas que me veré patético con este vestido siendo que no me quiero casar? — Murmuró mirándose al espejo. — Es el vestido que soñé pero no quisiera usarlo en estas condiciones. — La mujer se apoyo detrás suyo y acaricio sus hombros mientras lo miraba a través del espejo.

— A pesar de que no son las condiciones que deseamos deberías tratar de disfrutar un poco, después de todo también es tu día, incluso si no es lo que deseas. No podemos cambiarlo por más que queramos, solo quiero que seas feliz así que trata de disfrutar un poco de todo esto. — TaeHyung asintió con una sonrisa en su rostro. Frente a sus ojos y en blanco con detalles violetas y verdes pastel, el vestido de su princesa favorita de Disney, Tiana. Había soñado con casarse con un vestido igual al suyo y en unas horas estaría cumpliendo ese sueño.

La puerta sonó y luego su padre entró a la habitación. TaeHyung resoplo caminando hasta la mesa para darle un trago al whisky. Seguía enojado y la palabra quedaba corta para lo mucho que detestaba a su padre en ese preciso momento. Había sido claro cuando dijo que no lo quería ver y ahora aparecía frente a él con la cara más falsa del mundo, ni siquiera estaba feliz por el. Solo estaba feliz por tener el bolsillo lleno de millones a costillas suyas.

— Puedes regresar por donde viniste, no quiero verte, lo dije claro. — Soltó mordiendo uno de los brownies que su prometido había mandado para el. Tenía que darle puntos solo por eso, pero aún seguia cabreado. — Vete, no me he escapado y ya es tarde para hacerlo.

— TaeHyung, por favor basta de tus caprichos infantiles, si vine fue para felicitarte y desearte lo mejor, además de darte mi bendición y llevarte al altar. — TaeHyung dejo el postre sobre la mesa y comenzó a reír mientras aplaudía, su padre si que era un gran iluso.

— ¿Que tu que? ¿Disculpa? La única que me dará su bendición hacia el altar será mi Nana, tu no eres quién me llevara, ya lo decidí. — Murmuró lavándose las manos con cuidado y luego dejándose colocar los guantes de seda blancos. — Y mi prometido esta de acuerdo, así que no tienes nada que decir.

— ¿Tu como te atreves a tratarme de esta manera? Yo soy tu padre, soy yo quien debe llevarte al altar no esta vieja aparecida. — El castaño le dio una bofetada dejando su mano pintada en la mejilla de su progenitor, sabía que estaba mal golpear a su padre pero no iba a permitir que hablara de esa forma de su Nana, ella era quien lo había criado, era como su madre.

— Ni siquiera intentes mover tu lengua para denigar a mi Nana, ella ha hecho mejor trabajo que tu como mi verdadero padre, asi que más te vale respetarla. — Uno de los trabajadores del hotel tocó la puerta y luego entró informando que era hora de salir. — Espero que hayas entendido tu lugar, hay niveles.

TaeHyung salió de la habitación del brazo de su Nana mientras que esta le sonreía con cariño. Sabía que no había corazón más puro que el de su niño y se sentía plena de haberlo criado bien. Ambos caminaron hasta las puertas de cristal decorado con las flores que el doncel había escogido con anterioridad. Las puertas se abrieron dejando ver el salón justo como él lo quería. Decorado con enredaderas, flores tropicales y tulipanes, se sentía en casa.