𝗛𝗶𝗱𝗱𝗲𝗻 𝗽𝗮𝘀𝘀𝗶𝗼𝗻 ะ 𖤐 ᩼；|KookV

Capítulo 11.

𝘐 𝘬𝘦𝘦𝘱 𝘪𝘵 𝘫𝘶𝘪𝘤𝘺 𝘫𝘶𝘪𝘤𝘺, 𝘐 𝘦𝘢𝘵 𝘵𝘩𝘢𝘵 𝘭𝘶𝘯𝘤𝘩.
𝘚𝘩𝘦 𝘬𝘦𝘦𝘱 𝘵𝘩𝘢𝘵 𝘣𝘰𝘰𝘵𝘺 𝘣𝘰𝘰𝘵𝘺.

.𖤐 ᩼⁺

El doncel miró en su teléfono otra vez, 3:15 y su esposo no aparecía. Se había arreglado muy lindo y no podía negar que lo había hecho pensando en que diría cuando lo viera pero ahora no aparecía y comenzaba a molestarle lo impuntual que estaba siendo.

TaeHyung suspiro y saco su teléfono para pedir un taxi. Iría con o sin el, después de todo tenía la chequera y tenía dinero, no iba a quedarse con los crespos hechos solo por que él no apareció. En su pantalla apareció que el taxi estaba fuera por lo que TaeHyung tomó su bolso de mano y camino hasta la puerta, cuando la abrió se encontró de frente con el pecho de su esposo.

— Que poca palabra tienes. — Murmuró el doncel pasando de el y caminando hasta la reja para poder salir, el taxi estaba del otro lado. JungKook lo tomo del brazo deteniendo su caminar. — Sueltame, el taxi me espera.

— Tae, perdóname si me tarde, es que fui a comprarte un regalo. — El doncel levantó su mirada al rostro de su esposo y sus ojos se veían tan suplicantes. — Crei que te gustaría, me recordó mucho a ti, no fue mi intención hacerte esperar, discúlpame.

TaeHyung lo miró en silencio un instante y luego suspiro tomando las flores y la caja que el mayor le ofrecia. JungKook le sostuvo el ramo al doncel mientras esté abría la caja de terciopelo encontrándose con un precioso collar. El castaño lo observo con una sonrisa, era una mariposa con cristales de colores que hacían sus alas brillantes. TaeHyung miró al pelinegro con una sonrisa.

— ¿Te gusta?

— Si, me encanta. — Respondió con una risueño dándose la vuelta. — Ponmelo, quiero usarlo hoy. — JungKook sacó el collar de la caja y luego lo acomodo en el cuello del doncel cerrandolo en la parte de atrás. — Gracias.

— Me alegra saber que te gusta. — JungKook subió su mano hasta la mejilla del doncel dejando caricias sobre esta. — Te ves precioso, no podré dejar de mirarte en todo el día con lo lindo que estas. — Halago acercándose más al cuerpo contrario. — Tengo muchas cosas en mente pero lo único que me importa en este momento eres tu, no te enojes conmigo, se que lo arruino más veces de las que me gustaría pero te aseguro que no es mi intención.

TaeHyung sintió esa chispa de alegría en su corazón otra vez. La forma en la que JungKook lo miraba era diferente a cualquier hombre. Por más que el intentará negarlo siempre había ese brillo de maldad en los ojos de los hombres con los que había salido pero con JungKook era diferente, se sentía como algo nuevo.

— Bien, no me enojare contigo tan seguido. — Murmuró el castaño. — Pero si vuelves a hacerlo algo como lo de anoche no volveré a hablarte, nunca. — El pelinegro asintió con una sonrisa y comenzó a acercarse lentamente a los labios del castaño. Como si este fuera un conejito que cualquier movimiento brusco pudiera asustar. El tatuado aspiro el olor que el cuerpo de su esposo emanaba y suspiro a escasos sentimientos de sus gorditos labios.

Ya podia saborear ese bálsamo de frutos rojos hasta que el ruido del taxi los saco de su burbuja. TaeHyung acomodo el cabello detrás de su oreja tratando de disimular su vergüenza mientras que JungKook respiraba hondo para no matar a ese maldito taxista. De no ser por qué su precioso esposo estaba presente, porque respetaba su persona y porque estaba usando ropa limpia ya lo habría acabado a golpes.

— Yo llevo tu bolso. — TaeHyung le entrego el bolso al pelinegro acomodando su top. La ropa que estaba usando el doncel consistía en un top color verde con decoraciones violetas y uno de sus muchas faldas cargo descaderada, esta vez de color blanco, un cinturon de cuero negro y un broche de flor en el top. El doncel usaba unas sandalias bajas y un maquillaje sencillo que consistia en resaltar las mejillas y los labios.