verdades III

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Yo solo estaba en la sala del segundo piso, de la biblioteca me encontre unos libros algo interesantes, y sentia que era hora de devorarlos, asi que con ayuda de un chocolate caliente y
Una frazada que me habia prestado Dionicio estaba en el cielo, y claro, en el sofá mas super cómodo de todo este lugar; ya habian pasado tres dias desde que perseo y yo tuvimos esa noche especial y se me declaro, la verdad no me arrepiento, me trata como a una reina y como una amiga a la ves, el problema sera cuando le digamos a los demas, creo que petter querra asesinarlo pero conociendo a perseo eso no le importara.

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-Ya no te gusta mi amor William? - me abrazo desnud por la espalda, mientras yo solo prendia otro cigarro y despues le daba un trago al vodka
-lo que tu me das es sexo y no amor, entre tu y yo no ahi nada mas que eso-
ahi algo en Eriz que me provoca deseo, pero es solo eso, y yo quiero algo mas que solo sexo, no se en que me eh convertido pero no me gusta, solo existo pero no vivo, siento que yo mismo me estoy ahogando, soy una persona que no quiero ser y eso me vuelve loco, me frustra!
-por que andas tan malito conmigo?- dijo tratando de hacer su voz mas seductora- pero eriz sabe que te va a poner de buenas- se levanto de la cama y se puso enfrente de mi
- No se ni yo lo que me pone de buenas- susurre el comentario antes de tomar de la botella.
- siempre has dicho que te encanta que te modele la lencería que traiga puesta - dio un giro despacio, seximente pero me daba igual su cuerpo la verdad
- voy a caminar, nos vemos luego - solo quice decir eso mientras agarraba la camisa del sillón y me salia de la habitación, ya afuera me dispuse a ponermela, era un día muy frio aun para que fuera invierno, estaba oscureciendo, lo que hacia que apreciara las luces de la ciudad a lo lejos por las ventanas.
Entre a la biblioteca, debo de admitir que la lectura me tranquiliza cuando me siento asi y mas junto las historias de horror y misterio, pero aun teniendo el mejor libro no estaría cómodo leyendo en un lugar tan frio y oscuro, asi que decidí buscar la habitacion con el sofá mas cómodo.

Cuando entre a la sala del segundo piso, mire que alguien ya estaba en el sillón e hice lo que otro hubiera hecho en mi lugar
-quitate, ese es mi sofa- le dije a Alice mientras me fulminaba con la mirada
- era tan perfecta mi tarde que don egocéntrico tenia que arruinarla- me senté en la silla que estaba casi enfrente de mi sofá,y me incline hacia enfrente para poder discutir mejor
-bien, si me das el sofá, dejare de molestarte - dije mirando sus ojos verdes
-pues no te lo daré, estoy muy cómoda- se acomodo e hizo cono si yo no estuviera
-bien, entonces me quedare aqui molestandite- me recarge en este sofá y subí mis pies a los muslos de ella, lo cual la hizo enojar mas y a mi reir
-william! Baja los pies de mi!- grito
-si me das el sofa- dije muy calmado e hice mi sonrisa triufadora
- no! Yo llegue primero- comento para después seguir leyendo el libro e ignorarme, ya estaba cómodo, asi que abrí mi libro y comencé, entre hoja y hoja, con una mirada indirecta la veía a ella, estaba demasiado calmada como si no le importara que estuviera a solas conmigo, y cambiaba de pagina, su cabello rubio bajaba hasta llegar al sofá, era como una cascada de luz y su nariz estaba un poco roja al igual que sus mejillas eso significa que tenia algo de frío, su piel era como la nieve, y su mirada de ternura y cariño, pareciera que tuviera un "todo estara bien"para aquel que lo necesitara, creo que me recuerda a la mirada que mi madre tenia
-william?, por que te me quedas viendo?, traigo algo en la cara?-se toca las mejillas y se sentaba bien al igual que yo y mas cerca el uno del otro
-no seas tonta, no te miraba a ti, miraba el libro- se lo quite de las manos no tan bruscamente y mire la hoja que leía, el capitulo decía "origenes de los dioses"
-quiero saber un poco mas de lo que nos esta pasando - trato de justificarse- y tu? No creí que habria un libro de kamasutra para que tu y eriz pudieran leerlo
-en realidad estoy leyendo "macbeth" de ann radcliffe- dije superior y cruzaba su pierna.
-creo que no era de sorprenderme que te gustara el genero terror y gótico, pero debo de admitir que si me sorprendió que supieras de macbeth - tomó un sorbo de su taza y antes de que la dejara, yo tambien le tome pero ella no se molesto
-no sabes mucho de mi y es por que no quieres- mencione mientras dejaba la taza en la mesa- recuerda que cuando hibamos de compras, llenaba el carrito con libros de literatura clásica
-ahhhhh -hizo su expresión como si le volviera la memoria- es cierto -rio- siempre te dormias con el libro en la mano
-a si es -le sonrei - lo que me sorprende es que tu no estés bailando, en cambio estas sentada leyendo.
-creo que hoy me tome un descanso de mi rutina, de ves en cuando cambiar algunas cosas es bueno
- sonrió dulcemente y cerro los ojos mientras se recostaba placenteramente.
-creo que si- comente mientras la veía descansando.
-creo que ya no te guardo rencor william- me miró y sonrio
-disculpa?- casi grite- yo soy el que debería de ya no tener tanto rencor hacia ti
-pero que dices?, por que tu a mi, tu fuiste el que me juro amor eterno y te revolcarte con eriz al mismo tiempo- menciono alterada y se paro para huir de la conversacion pero la alcance a sostener del brazo
- yo me revolque con eriz despues de que tu me cambiaras por petter- abrio los ojos- no alcance boleto para verte pero te estaba esperando afuera con un cursi ramo de rosas, pero tardabas y entre a buscarte, y te vi abrazada de el, riéndose juntos, pero claro el paranoico era yo que exageraba del chico del parque! - toda esa furia guardada la deje salir, arrematando con la pobre Alice, la culpable de estos sentimientos, ella precia consternada y rápidamente la aprisione contra la pared, si ella ya no quería hablar sobre esto, lo siento por que yo si
- tu me hacías sentir tan bien conmigo mismo - pase mi nariz por su cabello, "vainilla" solo podía pensar - me hacías feliz- con mis roces se que cause un escalofrío ya que quiso apartarse pero le sostuve sus suaves manos y mi boca bajo a la suya la cual estaba temblando
-william..-trato de susurrar pero la bese, bese esos labios que me hacían trizas por dentro, esa droga que necesitaba, esa esencia, justo de esa momentaria eternidad de frenesí que sentí solo me digne a decirle "¿acaso el amor que te daba no era suficiente?", me deje caer en rodillas al suelo, esto significaba que ella habia ganado esta guerra por que yo me declaraba perdedor, me declaraba necesario de su amor

-william!, petter es mi hermano mayor!- que?, solo pude levantar la cabeza, para ver si lo que decía era cierto - cuando yo era pequeña, el se fue de la casa tambien siendo casi un niño -estupido! Estupido william!, por que eres tan idiota?! Por que no pudiste notar eso!, ahora que ella lo dice, muchas cosas tienen sentido, hasta su parecido, ¡idiota! Idiota william!

-perdona alice, me deje llevar por mis celos y te lastime- ella solo me obserbava, no decia nada - dame una oportunidad- la agarre de las manos y la llene de besos, mi corazón palpitaba a mil por hora, era de felicidad, ella jamas me rompio el corazón! -solo una oportunidad, por favor, te prometo que te are feliz, por favor... sin ti me siento vacio, me siento un monstruo sin vida - me pare enseguida y la queria ¡ besar y abrazar! - dejame probar esos labios otra vez- toque por un momento su boca con mis dedos y despues sus brazos.- dejame sentirte, estar cerca de tu cuerpo, dejame amarte, provocarte, conocerte- vi a alice alejarse de mi, perseo la estaba tomando entre sus brazos como unanpelicula de horror y su ricita que tenia en su cara queria borrarla con mi puño.
- lo siento william, pero ella no ara eso- perseo la beso la mejilla - asi que por favor no la vuelvas a tocar de esa manera, me incomoda
- ¿que? - solo dije eso sin saber que sucedia
-acepte ser la amante de perseo- senti como me hundia en el abismo de nuevo.
-No!- grite convencido - ella "no" te pertenece; yo se que ella me quiere, lo eh notado cuando me veia con Eriz, o tambien cuando me ve de esa forma tan maravillosa
- que te de importancia significa que es amable y sensible, no necesariamente significa que "te quiere"- sonrio
-ya callate!- me avente a perseo, no recuerdo nada tuve mi mente en blanco mientras trataba de destrosarle la cara, la cual no dejaba esa sonrisa idiota
-ya basta los dos!- la mire de reojo y lo unico que recuerdo, antes de caer al piso retorciendome, era un desteyo que venia a nosotros
-mierda Alice!-grite- podrias guardarte los trucos de magia por favor- despues de un momento, se silencio el cuarto y junto con ello, solo me levante y la mire
- creo que somos lo suficientemente maduros como para dejar de peleear; deberiamos de buscar otra solucion mas efectiva- diji perseo volteandome a ver
-¿y que propones?- pregunte
-propongo algo simple, que alice escoga- los dos miramos a Alice la cual estaba enfrente de nosotros y parecia asustada y agitada, en unos cuantos minutos, solo la vi desaparecer mientras que perseo hiba atras de ella, yo no le veia el caso, si ella no queria contestar por ahora, no importaba, no la obligaria a responder si ella aun no quiere, aunque la duda me este consumiendo.

Dioses del OlimpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora