No se que me pasa

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Llevo rato aquí y ese chico no la deja de ver como yo a el, solo esta ahí sentado, observándola, esto me huele mal.

después de 5 minutos se levanto y yo hice lo mismo, fue con ella y le estaba hablando, me daba repulsión esa imagen, ese niño bonito no sabe que no debe meterse con mis cosas, llegue por atrás de Alice y ella ni lo había notado.

- dijeron que ya nos podemos ir, así que andando- los interumpi, lo mire bien, era un peli amarillo con ojos verdes, alto igual que yo, ya que quedábamos cara a cara justamente y forma de cuerpo mas débil que el mio, sus facciones afinadas y note una cicatriz en su cuello en la parte derecha que apenas tapaba su cabello un poco largo.

-pero estoy hablando- se escucho molesta la rubia pero no me importo

- no te preocupes luego nos vemos alice- dijo el cobarde enfrente mio con una sonrisa sínica que levemente lo había notado, se fue dándome la espalda.

- vámonos- dije mientras la volteo a verla

-no quiero- respondió cortante

- no te estaba preguntando-sostuve su bolsa y la quería agarrar a ella pero se negó

- no iré, eres un bobo- menciono en voz alta

- sabes que ese chico te estaba coqueteando verdad?, y sabes que lo único que quiere es acostarse contigo verdad- dije, me estaba enojando mas su forma caprichosa de comportarse

- y si yo quería?, no tienes que meterte en mi vida, yo puedo hablar con todos los hombres que quiera y para lo que quiera- dijo desafiandome, por que jamas puede hacerme caso sin darme la contra?

- callate de una vez- dije tratando de calmarme, pero ya me estaba cabriando- suenas como una...- me detuve antes de terminar la frase y volteo a verla, la frase incompleta le había afectado, por que las mujeres son tan frágiles?

- una ramera? o hibas a decir zorra o puta?- me dedico una sonrisa pero no era la de siempre, era como si fuera a fuerzas

- ... Oye...-crujieron los mis dientes, no se como componer esto

- ya dejalo- se fue encaminando- vámonos- dijo en susurros.

La regué.

En el auto no me dirigió la palabra ni siquiera la vista, cuando llegamos a la plaza casi se me hiba de la vista al pasar por un montón de gente, hiba con la cabeza agachada, no lo soporte mas, me introduje empujando a la gente y la agarre por atrás, la abrace con fuerza, ella estaba entre mis brazos y no hizo nada por discutir, tenia el aroma de su cabello en mi nariz, vainilla, dulce y discreto.

- Perdón- le susurré en el oído- soy un idiota que no sabe lo que hace- hice una pausa- perdón- volví a repetir - Es solo que no quisiera que te hicieran daño- la apreté con mas fuerza, la volteo y no me importo nada, la bese agarrándola de los hombros para que no lograra ni siquiera moverse, la bese demostrándole el querer que le tengo, demostrándole que eran mentiras las palabras que se escapan de mi boca y que me estaba cabiando poco a poco .

-por que haces esto?-empezó a llorar, no entendida lo que pasaba, por que lloraba?- deja de jugar conmigo por favor- agarro su maleta y antes de que pudiera decirle algo salio corriendo perdiéndose entre el mundo de gente, no entiendo, mas bien no la entiendo a ella, me disculpe y salio peor?

- Oye tu el pelinegro, quieres un café? o tu noviecita te pega? - escuche una voz atrás de mi, al voltearme la vi, era la misma rubia que había visto cuando llegue defendiendo a Alice con su ex.

Dentro de mi ardió y sentí la adrenalina que erizar mi piel, algo raro me sucedió.

- claro que no preciosa, a mi nadie me manda.- le Sonreí, la chica con el vestido negro se acerco y me tomo del brazo, el lado de mi mente que decía que fuera por alice se esfumo y quedo el lado que siempre me ha mandado.

-así me gustan- se acerco demasiado a mi y no me pude controlar, la arrastre a mi auto y me la lleve, se que dejaríamos el café para otro día

(La de la foto es como una descripcion de la nueva chica, con la qie se fue william )

Dioses del OlimpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora